Se le conoce actualmente como Excuartel Juárez, pero desde su construcción el edificio ubicado sobre calle Pasteur en la Zona Centro de Durango, ha cambiado tanto de nombre como de giro. Se trata de un inmueble valioso del siglo XVIII que a decir del historiador y cronista de la ciudad, Javier Guerrero Romero, se encuentra en estado de abandono totalmente.
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Este lugar tiene su origen a finales del siglo XVIII, precisamente cuando Juan José Zambrano obtiene el permiso para construir un obraje, es decir, una fabrica de telas; por eso también hay quienes se refieren a este espacio como el real obraje.
Sin embargo, no se concreta, o no alcanza a funcionar como fábrica de telas por algunos problemas. Pero, finalmente sí se pone en operación como fábrica, pues se convirtió en una tenería, un lugar donde preparaban las pieles. Se empezó a construir hacía 1797, pero a principios del siglo XIX, hacía 1804 funcionaba como tenería.
De acuerdo a la historia narrada para El Sol de Durango por Javier Guerrero Romero, tras la muerte de Zambrano, en 1816, ese edificio es rentado por el Municipio a fin de establecer varias cosas, entre ellas la cárcel municipal que hasta ese momento había estado frente a la Plaza de Armas. También pasan la denominada Casa de Recogidas, que era una especie de orfelinato, donde se recibía a mujeres huérfanas o abandonadas.
Así funcionó durante un tiempo, hasta que en 1858, después de la aplicación de las leyes de reforma, y la exclaustración de los franciscanos, dejan solo el convento de San Antonio, y entonces la cárcel es trasladada al convento, donde ahora está el Multifamiliar. Y el edificio empieza a albergar al regimiento de caballería que había en Durango.
“Desaparece la casa de recogida, y se convierte en Cuartel. Después, tras la muerte de Benito Juárez se le va a llamar como Cuartel Juárez, en honor y reconocimiento o recuerdo a Benito Juárez, y va a funcionar como Cuartel desde 1858, y hasta 1991”.
Cuando se terminan de construir las ampliaciones del Campo Militar 5 de Mayo, el cual recibía solamente un regimiento, se ampliaron las instalaciones para otro. Entonces, se hacen gestiones desde el Municipio, en 1992, una vez que se construye el nuevo regimiento, para que ese edificio le sea cedido.
“A principios de 1993, el entonces presidente municipal, Gonzalo Yáñez, logra que el Gobierno federal le ceda al Municipio el antiguo Cuartel Juárez para que ahí se establezca un mercado, que se va a conocer como Excuartel Juárez”.
En aquel año, el objetivo de ese mercado era reunir todo el comercio informal que había en las calles, y evitar que hubiera los denominados plataformeros; los concentran ahí y se establece una Centra del Autobuses en las cercanías. Al llegar ahí los camiones, eso hacía que llegara gente para el Excuartel, para el comercio de ahí.
“A partir de esa fecha empieza a funcionar así, de 1993 para acá, este año está cumpliendo 30 años de haberse convertido en mercado. Los problemas del mercado son obvios, evidentes, fue rebasado, se invadió la parte exterior, afuera había una plazoleta conocida como la Plaza Santa Clara, pero esa desapareció. Donde está la fuente, pero ya los comerciantes llegan hasta la calle Pasteur. Entre la entrada del Cuartel y la calle Pasteur había una plaza, la cual desapareció por ser invadida”.