Aunque los modelos matemáticos advierten sobre la posibilidad de un cielo nuboso el próximo lunes 8 de abril, que podría impedir el avistamiento del eclipse solar total tan esperado por los duranguenses, el jefe de Hidrología y Meteorología de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Víctor Hugo Randeles, aseguró que esta información no es precisa ya que todavía faltan muchos días para tener un pronóstico certero para esa fecha.
- Te puede interesar: Así se anunció hace décadas el Eclipse Solar Total de este 2024
Explicó que la tecnología con la que se cuenta actualmente es posible conocer de manera más acertada el clima que se tendrá para esa fecha, tres o cuatro días antes de la presencia del fenómeno astronómico, esto significa que el pronóstico más acertado es el que se tenga el viernes 5 de abril.
“Faltan muchos días todavía, los modelos no se interpretan así”, señaló el especialista, quien aseguró que más allá de los días que se tienen previstos para tener un resultado acertado, hay mucha susceptibilidad de que el pronóstico cambie.
“De acuerdo con nuestra experiencia, hemos visto que muchas veces cambian y sucede totalmente lo contrario, tanto en nubosidad, como precipitación o heladas. Entonces no podemos emitir un pronóstico y menos de esa magnitud cuando todavía faltan varios días”, comentó.
De esta manera, la Conagua emitirá un pronóstico sobre las condiciones climatológicas del lunes 8 de abril, a más tardar cuatro días antes, a fin de que sea el más cercano posible a la realidad.
Aunque a la fecha los instrumentos tecnológicos utilizados para analizar el clima de los próximos días, se alcanza a observar nubosidad que se asentará en gran parte de la zona de los valles y los llanos, cerca de las 12:00 del día, cuando se encuentre el eclipse en su etapa máxima del avistamiento, “solo estamos elucubrando con cosas que todavía pueden cambiar bastante”, aseguró.
Y es que desde hace ya varios días, se comenzó a difundir información sobre una posible banda de nubosidad que cubrirá el cielo durante ese día, lo que podría impedir un buen avistamiento del fenómeno astronómico más esperado en los últimos años por especialistas, aficionados y la sociedad en general y donde el municipio de Nazas, en Durango, será el punto ideal para tener una mejor vista.
