El caso reciente en el que una empleada de una tienda departamental asesinada al interior de la misma a plena luz del día, no mancha el lugar logrado por Durango, al ubicarse como la cuarta entidad más pacífica del país, aseguró el diputado local Luis Enrique Benítez Ojeda, al referirse a los resultados dados a conocer por el Índice de Paz México 2024 y las protestas de mujeres y hombres para exigir justicia para Liliana, del pasado lunes.
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Señaló que casos de homicidios y feminicidios habrá siempre, y es difícil evitarlos ante el alcance que llega a tener la delincuencia, sin embargo esto no significa que provoque una afectación que incida en los índices estadísticos en los que se coloca Durango.
“Es una llamada de atención para reforzar las medidas de prevención, para hacer un llamado a la población a estar alertas, para no dejar pasar las cosas sin hacer algo, al contrario hay mucho por hacer. Pero por un delito no infecta la calificación de Durango como un estado tranquilo”, dijo.
Explicó que la calificación que se pone a los estados de acuerdo a este tipo de mediciones, es en relación a temas como el avance del narcotráfico y el crimen organizado, por lo que calificó como un “lamentable feminicidio”, es una llamada de atención para la sociedad y el gobierno a estar alertas para que este caso no se quede impune.
Destacó que en lo que debe poner atención la autoridad municipal, estatal y federal, es en la falta de credibilidad por parte de los ciudadanos en las instituciones encargadas de vigilar y procurar justicia en la entidad y decidan tomar venganza de otra manera, cuando existen leyes que deben ser aplicadas y respetadas.
“La gente está desesperada, yo respeto las expresiones y manifestaciones que hay, pero me parece que la violencia no se combate con más violencia, habría que protestar civilizada y pacíficamente”, dijo al referirse a los hechos ocurridos el pasado lunes, en los que un grupo de ciudadanos acudieron a la tienda departamental ubicada frente a la Plaza de Armas y en un momento de enojo ante los hechos y la falta de certeza sobre el presunto asesino, quebraron vidrios y quemaron mercancía.