Mediante la solemne ceremonia que tuvo como marco la Iglesia de Nuestra Señora de la Salud el pequeño Carlos Emilio Contreras Ayala recibió el primero de los sacramentos que otorga la iglesia católica.
Para este momento tan especial el guapo caballerito lució un bonito trajecito en color beige con blanco que lo hizo lucir encantadora y estuvo acompañado de sus orgullosos padres Mónica Ivette Ayala Venegas y Sergio Contreras Álvarez.
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Los esposos Contreras Ayala invitaron como padrinos de su heredero a Ana Cecilia Contreras Álvarez y Rodrigo Díaz Aguiñaga, quienes junto a sus papás se comprometieron ante el sacerdote oficiante a encargarse de encaminar en la fe católica al nuevo cristiano.
En la celebración el padre que fungió como padrino de óleos destacó para todos ellos y sus familiares y amistades que se dieron cita que el bautismo es el primer sacramento del cristianismo, el cual se practica como un ritual de iniciación en todas las confesiones religiosas que siguen el mensaje de Jesucristo.
Durante el acto les dijo que el acto la inmersión en agua alude a los rituales de purificación antiguos en los cuales el penitente se sumergía en las aguas y se levantaba de ellas en señal de renacimiento espiritual, acto que fue replicado por Juan el bautista y que hiciera lo mismo con Jesús.
Por medio del bautismo las personas expresan el arrepentimiento de sus pecados, el nacimiento a una nueva vida orientada al seguimiento del Evangelio y su incorporación a la comunidad de creyentes, es decir, a la iglesia católica.
Dijo que a partir de este momento Carlos Emilio recibe el don del Espíritu Santo, la redención de los pecados y, en consecuencia, la gracia de Dios. Agregó que antiguamente, el bautismo se practicaba en la edad adulta, tal como hoy en día se sigue haciendo en otras sectas, pero en la católica es costumbre hacerlo cuando son pequeños, por lo que los felicitó por tomar esta importante decisión en sus vidas.
Posteriormente el pequeño fue ungido con aceite y posteriormente bañado con las aguas benditas del Río Jordán para de esta manera convertirse en un nuevo integrante de la iglesia católica.
Al término de la misma, su familia felicitó a papás y padrinos en el atrio del recinto en donde tuvo lugar la ceremonia y donde recibieron bonitos bolos a manera de recordatorios del grato momento.
Posteriormente los esposos Contreras Ayala festejaron con una gran fiesta en la Hacienda La Jacona que lució espectacular decoración y en donde se sirvió un exquisito banquete para disfrutar del emotivo acontecimiento social, en donde se encontraban sus abuelitos José Rafael Ayala Barajas, María Balvina Venegas, María del Carmen Álvarez Rico y Sergio Contreras López.
