Ante los reclamos de la ciudadanía por la falta de docentes en las aulas de las instituciones de educación básica en el estado, el secretario de Educación, Guillermo Adame Calderón, aseguró que al ser un sistema que tiene cerca de 33 mil trabajadores, es normal que existan espacios pues los maestros se enferman, incapacitan o tienen alguna otra situación; sin embargo se han cubierto para evitar que los menores interrumpan su aprendizaje.
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“Nos ayudan mucho las quejas de los padres de familia, nosotros no las rehuimos, al contrario las provocamos, las solicitamos”, comentó el funcionario estatal, por lo que cada vez que un padre de familia note que un grupo no sea atendido por un docente, les pedimos que nos llamen y de inmediato se toman medidas.
Explicó que esto es parte del comportamiento regular en el sistema educativo estatal, sin embargo ante las denuncias que advierten de una ausencia de hasta dos meses o incluso años, Adame Calderón, aseguró que los padres de familia en aras de solucionar el problema inmediatamente, “los padres de familia toman el medio o las redes y exageran un poco la situación”.
Advirtió que es prácticamente imposible tener aulas sin maestro durante dos meses, mucho menos durante dos años, como lo aseguran, y los casos más críticos que se tienen son aquellos de la zona sierra, en donde USICAM pide que los docentes tengan ciertos perfiles, que en ocasiones no hay quien los cubra.
“El propio sistema tiene para atención, si un maestro falta, el supervisor escolar debe mandar un ATP o hay un subdirector en el plantel que cubra inmediatamente el espacio”, comentó el titular de la SEED.
