Estimado lector, ante la formidable información sobre las próximas elecciones que se celebrarán en nuestro país, se han abordado diferentes temas sobre los gobiernos, las instancias que regulan las elecciones, los partidos, las precampañas y los candidatos. Poco se toca el tema de la democracia y lo que considero vital para el sufragio en sí. ¡El valor del voto para la vida democrática de un país! Justo es el tema que abordo.
La RAE, define al voto como: “Expresión pública o secreta de una preferencia ante una opción”. Ampliando la definición, el voto es un acto por el cual una persona expresa apoyo o preferencia por cierta moción, propuesta, candidato o selección de candidatos durante un tiempo de elección, de forma secreta o pública.
Ante las circunstancias políticas que imperan en nuestro país, cualesquiera que éstas sean, dada la importancia histórica y la relevante magnitud de la elección que está en puerta, nos da la oportunidad de reflexionar sobre el estado que guarda la democracia en México.
Aceptemos que la democracia tiene diferentes dimensiones e intensidades en todos los países que son democráticos. Este llamémosle rango de dimensión e intensidad democrática, constituyen los retos por los que todos los ciudadanos luchamos. Tener cada vez más, un país más democrático. Esta lucha, nunca terminara.
En este tenor, todos los ciudadanos que vivimos en países democráticos, queremos vivir con un gobierno justo, queremos vivir en armonía, cohabitando con nuestras similitudes y diferencias. Dirimiéndolas sin violencia y con razones.
Y en el gobierno que elijamos, queremos el respeto a la ley, a la seguridad, educación y sustentabilidad acorde con los vaivenes propios en el desarrollo de toda sociedad.
¿Buscamos una utopía? Creo que buscamos la justa dimensión e intensidad de democracia de acuerdo a nuestro
propio desarrollo social, económico y político y también a las condiciones internacionales imperantes.
¿Cómo lograrlo? Con la participación efectiva de nosotros los ciudadanos en las elecciones. ¡Votando!
Tenemos el derecho de tener un proceso que garantice la transparencia, la promoción participativa, inclusiva e imparciales. ¿Por qué? Porque queremos tener, promover y dejar una sociedad justa, pacífica e inclusiva, para nosotros y las futuras generaciones.
Todo esto representa el valor del voto.
Y si tenemos dudas en la promoción del voto, tenemos el derecho de promover la participación ciudadana y de promover el voto nosotros mismos como sociedad civil. No es Ningún delito hacerlo.
El voto es poder y se tiene el derecho a ejercerlo. Un solo voto representa una voz. Millones de votos, representan millones de voces, y éstas no serán iguales, pero serán escuchadas en las urnas.
El valor del voto representa: el estado en que los ciudadanos quieren que las cosas se hagan como quieren; Representa la legitimidad democrática; El voto es de los ciudadanos y de nadie más.
Para dar más valor al voto, promovamos el voto bien informado. Para ello es menester escuchar, conocer y evaluar a los candidatos y a sus propuestas. El voto informado implica decisiones razonadas.
Es indiscutible que una de las cosas más relevantes de una sociedad, es la de elegir a quienes nos gobiernan.
Cito unas ideas de Carlos Castañeda (consultado en 2024): “El valor de un voto es una expresión de respeto mutuo entre los ciudadanos que integran una sociedad; Es la expresión más acabada del avance civilizado de toda sociedad; Es la expresión del valor que como ser humano tenemos, basándonos en el respeto a la diferencia; Es el respeto por la diferencia para que nos permita convivir de manera pacífica
para el bien común y sin confrontaciones; Pero sobre todo en igualdad, sin imposición de unos sobre otros, sin descalificaciones por pensar distinto”.
El valor del voto, es uno de los derechos más preciados que tiene una sociedad. ¡Participemos y ejerzamos nuestro derecho, sufragando por lo que creemos que es lo correcto y por lo que pensamos que es lo mejor para nuestra sociedad!
¡Hasta la próxima!
Ante las circunstancias políticas que imperan en nuestro país, cualesquiera que éstas sean, dada la importancia histórica y la relevante magnitud de la elección que está en puerta, nos da la oportunidad de reflexionar sobre el estado que guarda la democracia en México
En el gobierno que elijamos, queremos el respeto a la ley, a la seguridad, educación y sustentabilidad acorde con los vaivenes propios en el desarrollo de toda sociedad
