/ miércoles 8 de julio de 2020

Evocaciones durangueñas de antaño y hogaño del poeta Alfonso Terrones

En un evento cultural inédito, para una presentación del libro en Durango; enmarcado en las normas sanitarias del confinamiento obligado por la pandemia del coronavirus; el viernes 3 de julio a las 18:00 horas, fue comentado y presentado el libro “Evocaciones de Durango, Sonetos de Antaño y Hogaño” a través de la plataforma de internet Zoom, organizado por la Asociación Cultural Quivira, que preside la maestra Irma Galván Juárez, con el apoyo técnico del ingeniero Fernando Vázquez G., registrando un exitoso enlace virtual de más de 250 internautas inscritos.

Los comentaristas de la obra fueron el Dr. Miguel Vallebueno Garcinava, director del Archivo Histórico de Durango, de la Lic. Dalila Samanta Rivas Coronel, del Instituto de Cultura del Estado de Durango; la señora Fanny Terrones Macías, Lic. José Antonio Miguel Abascal Terrones, familiares del desaparecido autor, y el que esto escribe.

El libro en comento, es de la autoría del preclaro escritor, poeta y cronista Alfonso Terrones Benítez, ausente de este mundo físico hace 40 años, sin embargo, ha logrado trascender a la literatura duranguense, gracias a la esperada edición de esta obra literaria, que su autor dejara inédita y en custodia de su sobrino, el también ya desaparecido, doctor Miguel Terrones Langoné y de su sobrina nieta, Fanny Terrones Macías, a quien, merced a su atingencia y tesón, pudo cristalizar el otrora proyecto de su padre y de su tío, de que el texto pudiera entregarse a la sociedad durangueña.

Un valioso trabajo literario que permaneciera en custodia de la familia Terrones, por años, y que fuera organizado, corregido y seleccionado en su tiempo por Terrones Langoné, quien destinara horas enteras de trabajo, para trascribir los más de mil sonetos y relatos manuscritos y trabajados en la -ya en desuso- máquina de escribir que fuera tradicional en la década de los ochentas, y que dicha compilación constituyera la columna vertebral, para que la empresa “Artes Gráficas La Impresora”, llevara a feliz término su edición preliminar.

Es de resaltar la contribución de la Universidad Juárez del Estado de Durango en el quehacer editorial y financiero; así mismo, del Instituto de Cultura del Estado de Durango, a través de Dalila Samanta Rivas Coronel, quien tras de que le fuera presentado dicho proyecto, de inmediato brindó su apoyo económico para dicho propósito.

El autor del libro es Alfonso Terrones Benítez, el menor de 8 hermanos, nacido en la ciudad de Durango, en 1902 y fallecido en 1981 a la edad de 79 años; vivió en carne propia los avatares la Revolución Mexicana; en Durango, contempló desgarradoras escenas de la Toma de la Ciudad del 18 de junio de 1913, mismas que plasma en su libro con una magistral inocencia y creatividad en sus composiciones literarias, que van desde el sentido poema hasta el anécdota chusco, que observó a sus tiernos 11 años de edad.

Sus hermanos mayores fueron la base fundamental en su formación personal y profesional, constituyendo el timón y fuente de inspiración de innumerables anécdotas y vivencias que dejó para la posteridad.

Su hermano Alberto Terrones fue un hombre importante en su vida, por su trayectoria y formación política como Constituyente de 1917, además de escritor y político; de igual manera, sus hermanos Arturo y Adolfo, forjados en la milicia y en la política, el primero de ellos, llegó a general del ejército mexicano con gran contribución al movimiento revolucionario de 1910, y el segundo como funcionario probo, político y militar; ambos miembros reconocidos de la masonería durangueña al igual que Alfonso.

De tal suerte, que él, como hermano menor, asimiló no sólo su formación en valores familiares, y su empatía con la sociedad duranguense, sino que a temprana edad afloró su vena literaria que con el paso del tiempo consolidó como poeta y compositor en la Sociedad de Autores y Compositores de México, siendo reconocido como socio fundador. Autor de un sinnúmero de poemas y melodías que han sido interpretadas por grandes cantantes de la talla de Juanita Escoto y Alberto Romo, por citar algunos.

De la inspiración personal de Alfonso Terrones, fueron los siguientes versos dedicados a su amigo Estanislao “El Prieto” Aragón, al tenor siguiente: Entrañables amigos en la infancia / Compañeros después, adolescentes / y ya adultos, Ideólogos fervientes, / combatimos la torpe intolerancia. / Con las armas, y en toda circunstancia / como hermanos los dos, sin ser parientes, / enfrentamos a rudos contendientes, / siempre unidos en franca militancia. / Un amigo más fiel no lo he tenido / tan modesto, valiente y decidido, / en su noble y total desinterés… / Eso ha sido el gran prieto y eso es. / en la dulce mirada, su alma buena / blanca aflora…tras esa piel morena. México, DF. Junio 23 de 1967.

Bienvenida la obra de Alfonso Terrones Benítez, quien llena un vacío dentro de los intelectuales olvidados de Durango, que la historia literaria gratamente los rescata.

En un evento cultural inédito, para una presentación del libro en Durango; enmarcado en las normas sanitarias del confinamiento obligado por la pandemia del coronavirus; el viernes 3 de julio a las 18:00 horas, fue comentado y presentado el libro “Evocaciones de Durango, Sonetos de Antaño y Hogaño” a través de la plataforma de internet Zoom, organizado por la Asociación Cultural Quivira, que preside la maestra Irma Galván Juárez, con el apoyo técnico del ingeniero Fernando Vázquez G., registrando un exitoso enlace virtual de más de 250 internautas inscritos.

Los comentaristas de la obra fueron el Dr. Miguel Vallebueno Garcinava, director del Archivo Histórico de Durango, de la Lic. Dalila Samanta Rivas Coronel, del Instituto de Cultura del Estado de Durango; la señora Fanny Terrones Macías, Lic. José Antonio Miguel Abascal Terrones, familiares del desaparecido autor, y el que esto escribe.

El libro en comento, es de la autoría del preclaro escritor, poeta y cronista Alfonso Terrones Benítez, ausente de este mundo físico hace 40 años, sin embargo, ha logrado trascender a la literatura duranguense, gracias a la esperada edición de esta obra literaria, que su autor dejara inédita y en custodia de su sobrino, el también ya desaparecido, doctor Miguel Terrones Langoné y de su sobrina nieta, Fanny Terrones Macías, a quien, merced a su atingencia y tesón, pudo cristalizar el otrora proyecto de su padre y de su tío, de que el texto pudiera entregarse a la sociedad durangueña.

Un valioso trabajo literario que permaneciera en custodia de la familia Terrones, por años, y que fuera organizado, corregido y seleccionado en su tiempo por Terrones Langoné, quien destinara horas enteras de trabajo, para trascribir los más de mil sonetos y relatos manuscritos y trabajados en la -ya en desuso- máquina de escribir que fuera tradicional en la década de los ochentas, y que dicha compilación constituyera la columna vertebral, para que la empresa “Artes Gráficas La Impresora”, llevara a feliz término su edición preliminar.

Es de resaltar la contribución de la Universidad Juárez del Estado de Durango en el quehacer editorial y financiero; así mismo, del Instituto de Cultura del Estado de Durango, a través de Dalila Samanta Rivas Coronel, quien tras de que le fuera presentado dicho proyecto, de inmediato brindó su apoyo económico para dicho propósito.

El autor del libro es Alfonso Terrones Benítez, el menor de 8 hermanos, nacido en la ciudad de Durango, en 1902 y fallecido en 1981 a la edad de 79 años; vivió en carne propia los avatares la Revolución Mexicana; en Durango, contempló desgarradoras escenas de la Toma de la Ciudad del 18 de junio de 1913, mismas que plasma en su libro con una magistral inocencia y creatividad en sus composiciones literarias, que van desde el sentido poema hasta el anécdota chusco, que observó a sus tiernos 11 años de edad.

Sus hermanos mayores fueron la base fundamental en su formación personal y profesional, constituyendo el timón y fuente de inspiración de innumerables anécdotas y vivencias que dejó para la posteridad.

Su hermano Alberto Terrones fue un hombre importante en su vida, por su trayectoria y formación política como Constituyente de 1917, además de escritor y político; de igual manera, sus hermanos Arturo y Adolfo, forjados en la milicia y en la política, el primero de ellos, llegó a general del ejército mexicano con gran contribución al movimiento revolucionario de 1910, y el segundo como funcionario probo, político y militar; ambos miembros reconocidos de la masonería durangueña al igual que Alfonso.

De tal suerte, que él, como hermano menor, asimiló no sólo su formación en valores familiares, y su empatía con la sociedad duranguense, sino que a temprana edad afloró su vena literaria que con el paso del tiempo consolidó como poeta y compositor en la Sociedad de Autores y Compositores de México, siendo reconocido como socio fundador. Autor de un sinnúmero de poemas y melodías que han sido interpretadas por grandes cantantes de la talla de Juanita Escoto y Alberto Romo, por citar algunos.

De la inspiración personal de Alfonso Terrones, fueron los siguientes versos dedicados a su amigo Estanislao “El Prieto” Aragón, al tenor siguiente: Entrañables amigos en la infancia / Compañeros después, adolescentes / y ya adultos, Ideólogos fervientes, / combatimos la torpe intolerancia. / Con las armas, y en toda circunstancia / como hermanos los dos, sin ser parientes, / enfrentamos a rudos contendientes, / siempre unidos en franca militancia. / Un amigo más fiel no lo he tenido / tan modesto, valiente y decidido, / en su noble y total desinterés… / Eso ha sido el gran prieto y eso es. / en la dulce mirada, su alma buena / blanca aflora…tras esa piel morena. México, DF. Junio 23 de 1967.

Bienvenida la obra de Alfonso Terrones Benítez, quien llena un vacío dentro de los intelectuales olvidados de Durango, que la historia literaria gratamente los rescata.