Vota
El próximo 2 de junio habrá elecciones federales y locales en México. Ejercer nuestro voto no solo es un derecho que tenemos todos los mexicanos, sino que es una obligación. El Catecismo de la Iglesia Católica sostiene en el número 2240: «La sumisión a la autoridad y la corresponsabilidad en el bien común exigen moralmente el pago de los impuestos, el ejercicio del derecho al voto, la defensa del país».
Votar es, por tanto, para los católicos no sólo un derecho sino un deber moral puesto que del resultado de las elecciones se deriva el bien común. Ejercer el derecho al voto implica buscar a la luz del Evangelio el resultado que conviene al bien común. Debido a este deber moral, la Conferencia del Episcopado Mexicano nos ha propuesto cinco puntos para ejercer este derecho y este deber del voto:
1. Pensar el voto: antes de votar, debemos asegurarnos de saber lo que estamos decidiendo. Nuestro voto es como nuestra voz, así que hay que usarlo con confianza y sin permitir que nadie nos lo quite. Hay que votar sin miedo y con libertad.
2. Votar pensando en lo mejor para todos: hay que buscar a los que están comprometidos con un México unido. Queremos un país en el que se respeten nuestros derechos y haya seguridad y justicia para todos.
3. Votar para después poder exigir: hay que elegir a los candidatos que de verdad nos representen y luego hay que recordarles que cumplan lo que prometieron.
4. Votar libremente y sin condiciones: los derechos de los ciudadanos están protegidos por la Constitución, por lo que nadie nos los puede amenazar o quitar.
5. Todos debemos votar: hay que animar a los demás a que voten este próximo 2 de junio. Que lo hagan sin miedo y con el compromiso por la paz y por el bien común.
Oramos y deseamos que esta jornada electoral se lleve a cabo en paz y con un ejercicio realmente democrático. Todo ello con la firme esperanza de que en México tengamos una vida digna. Así sea.