/ viernes 3 de mayo de 2019

Jóvenes volver a pensar

La epidemia que amenaza a varios países del mundo

Si, si recordamos las calles de nuestra ciudad hace 10 años, las calles de 20 de Noviembre y 5 de Febrero lucían semivacías, la población que se atrevía a salir, sólo con cubrebocas de todos los modelos, colores y hasta burdas improvisaciones, el temor era bien fundado, nos amenazó e hizo estragos el virus de la gripe A (H1N1).

Se especula que el inicio de la pandemia haya tenido como origen la condición de las Granjas Carroll en el municipio de Perote de ese estado. Al mes la pandemia se extendió por varios estados de México, Estados Unidos y Canadá, para exportarse a partir de entonces, con aparición de numerosos casos en otros países de pacientes que habían viajado a México y Estados Unidos.

Se han constatado unos pocos casos de contagios indirectos (de personas que no han estado en dicha región) en España, Alemania, Corea del Sur y Reino Unido. El 29 de abril de 2009, la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó el brote de gripe A (H1N1) como de nivel de alerta cinco; es decir, pandemia inminente.

Ese nivel de alerta no define la gravedad de la enfermedad producida por el virus, sino sólo su extensión geográfica. Después se elevó el nivel de alerta a seis. Se suspendieron clases en los centros escolares, se suspenden eventos masivos, inclusive en muchas Diócesis se suspendieron las misas dominicales, se reportaron compras de pánico en los supermercados y hasta en el exterior los nacionales fueron discriminados, terribles recuerdos los que lo vivimos como personal de salud y como sociedad civil.

Y finalmente, el presidente de México dio un mensaje a la nación el 4 de mayo de 2009; con respecto a la reanudación escalonada de las actividades estudiantiles y productivas del país, debiendo tener todavía en cuenta los cuidados higiénicos.

Cómo no olvidar, sin embargo, diez años nos vemos enfrentados a otra enfermedad aparentemente controlada, si nada más ni nada menos que el ¡SARAMPIÓN!… El sarampión es una enfermedad infecciosa exantemática como la rubeola o la varicela, bastante frecuente, especialmente en niños, causada por un virus, específicamente de la familia paramyxoviridae del género Morbillivirus.

Se caracteriza por las típicas manchas en la piel de color rojo (exantema), así como la fiebre y un estado general debilitado. Si se presentan complicaciones, el sarampión puede causar inflamación en los pulmones y en el cerebro que amenazan la vida del paciente el diagnóstico se hace a través del cuadro clínico y la detección de anticuerpos en la sangre.

No existe terapia específica para el tratamiento de la enfermedad; sin embargo, se puede prevenir mediante la administración de la vacuna contra el sarampión.

En el pasado, la vacuna triple vírica (también conocida como SPR) ha reducido el número de infecciones. La cual se encuentra en el sector salud y es gratuita, y viene la paradoja “En 1998, la Asamblea Mundial de la Salud estableció el objetivo de la eliminación del sarampión endémico de la Región Europea en el 2007, para poder certificar su eliminación antes del 2010”.

El sarampión es un virus de transmisión aérea altamente contagioso, el cual se propaga primordialmente a través del sistema respiratorio. El virus es transmitido en secreciones respiratorias, y puede ser pasado de persona a persona vía gotitas de saliva (gotas de Flügge) que contienen partículas del virus, como las producidas por un paciente con tos.

Una vez que la transmisión ocurre, el virus infecta las células epiteliales de su nuevo huésped, y pueden replicarse en el cuerpo.

Hoy, casi 170 millones de niños en todo el mundo, incluidos más de 2,5 millones en Estados Unidos y medio millón en el Reino Unido, no recibieron la primera dosis de la vacuna contra el sarampión durante los pasados ocho años, lo que abre la posibilidad de brotes globales de la enfermedad, indica un informe de Unicef divulgado el 25 de abril del año en curso “El caldo de cultivo de los brotes mundiales de sarampión de los que somos testigos hoy en día se estableció hace años”, dijo Henrietta Fore, directora ejecutiva de Unicef -el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia-, a través de un comunicado.

“El virus del sarampión siempre encontrará a niños sin vacunar”, ahora más de 365 niños mueren de sarampión cada día, de acuerdo con Unicef, y la enfermedad también puede causar ceguera, sordera o daño cerebral. ¿Por qué? Pasa esto en primer lugar la indolencia de los padres de vacunar a sus hijos en nuestro país.

Y desde que la vacunación empezó a practicarse, sus oponentes han mantenido que las vacunas no funcionan, que son o pueden ser peligrosas, que en su lugar debería hacerse énfasis en la higiene personal, o que las vacunaciones obligatorias violan derechos individuales o principios religiosos. Desde entonces, campañas contra la vacunación han dado como resultado daños innecesarios y muertes en masa.

En 2019, la Organización Mundial de la Salud catalogó a estos grupos de radicales anti-vacunas como una de las principales amenazas a la salud mundial. Quede claro “Mientras los brotes de sarampión están aumentando entre grupos de niños no vacunados en Estados Unidos, principalmente en los estados de Washington, Nueva York y Texas, un nuevo y extenso estudio publicado esta semana no encontró ninguna relación entre la vacuna contra el sarampión y el autismo, razón a la que con frecuencia aluden los padres para rechazarla”, hay que recordar la migración de las personas de nuestro estado hacia esos lugares del vecino de norte… ¡Por Amor vacuna a tus hijos!

Post eventum vani sunt questus “cuando aparece el necio todo son problemas”.

tomymx@me.com

La epidemia que amenaza a varios países del mundo

Si, si recordamos las calles de nuestra ciudad hace 10 años, las calles de 20 de Noviembre y 5 de Febrero lucían semivacías, la población que se atrevía a salir, sólo con cubrebocas de todos los modelos, colores y hasta burdas improvisaciones, el temor era bien fundado, nos amenazó e hizo estragos el virus de la gripe A (H1N1).

Se especula que el inicio de la pandemia haya tenido como origen la condición de las Granjas Carroll en el municipio de Perote de ese estado. Al mes la pandemia se extendió por varios estados de México, Estados Unidos y Canadá, para exportarse a partir de entonces, con aparición de numerosos casos en otros países de pacientes que habían viajado a México y Estados Unidos.

Se han constatado unos pocos casos de contagios indirectos (de personas que no han estado en dicha región) en España, Alemania, Corea del Sur y Reino Unido. El 29 de abril de 2009, la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó el brote de gripe A (H1N1) como de nivel de alerta cinco; es decir, pandemia inminente.

Ese nivel de alerta no define la gravedad de la enfermedad producida por el virus, sino sólo su extensión geográfica. Después se elevó el nivel de alerta a seis. Se suspendieron clases en los centros escolares, se suspenden eventos masivos, inclusive en muchas Diócesis se suspendieron las misas dominicales, se reportaron compras de pánico en los supermercados y hasta en el exterior los nacionales fueron discriminados, terribles recuerdos los que lo vivimos como personal de salud y como sociedad civil.

Y finalmente, el presidente de México dio un mensaje a la nación el 4 de mayo de 2009; con respecto a la reanudación escalonada de las actividades estudiantiles y productivas del país, debiendo tener todavía en cuenta los cuidados higiénicos.

Cómo no olvidar, sin embargo, diez años nos vemos enfrentados a otra enfermedad aparentemente controlada, si nada más ni nada menos que el ¡SARAMPIÓN!… El sarampión es una enfermedad infecciosa exantemática como la rubeola o la varicela, bastante frecuente, especialmente en niños, causada por un virus, específicamente de la familia paramyxoviridae del género Morbillivirus.

Se caracteriza por las típicas manchas en la piel de color rojo (exantema), así como la fiebre y un estado general debilitado. Si se presentan complicaciones, el sarampión puede causar inflamación en los pulmones y en el cerebro que amenazan la vida del paciente el diagnóstico se hace a través del cuadro clínico y la detección de anticuerpos en la sangre.

No existe terapia específica para el tratamiento de la enfermedad; sin embargo, se puede prevenir mediante la administración de la vacuna contra el sarampión.

En el pasado, la vacuna triple vírica (también conocida como SPR) ha reducido el número de infecciones. La cual se encuentra en el sector salud y es gratuita, y viene la paradoja “En 1998, la Asamblea Mundial de la Salud estableció el objetivo de la eliminación del sarampión endémico de la Región Europea en el 2007, para poder certificar su eliminación antes del 2010”.

El sarampión es un virus de transmisión aérea altamente contagioso, el cual se propaga primordialmente a través del sistema respiratorio. El virus es transmitido en secreciones respiratorias, y puede ser pasado de persona a persona vía gotitas de saliva (gotas de Flügge) que contienen partículas del virus, como las producidas por un paciente con tos.

Una vez que la transmisión ocurre, el virus infecta las células epiteliales de su nuevo huésped, y pueden replicarse en el cuerpo.

Hoy, casi 170 millones de niños en todo el mundo, incluidos más de 2,5 millones en Estados Unidos y medio millón en el Reino Unido, no recibieron la primera dosis de la vacuna contra el sarampión durante los pasados ocho años, lo que abre la posibilidad de brotes globales de la enfermedad, indica un informe de Unicef divulgado el 25 de abril del año en curso “El caldo de cultivo de los brotes mundiales de sarampión de los que somos testigos hoy en día se estableció hace años”, dijo Henrietta Fore, directora ejecutiva de Unicef -el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia-, a través de un comunicado.

“El virus del sarampión siempre encontrará a niños sin vacunar”, ahora más de 365 niños mueren de sarampión cada día, de acuerdo con Unicef, y la enfermedad también puede causar ceguera, sordera o daño cerebral. ¿Por qué? Pasa esto en primer lugar la indolencia de los padres de vacunar a sus hijos en nuestro país.

Y desde que la vacunación empezó a practicarse, sus oponentes han mantenido que las vacunas no funcionan, que son o pueden ser peligrosas, que en su lugar debería hacerse énfasis en la higiene personal, o que las vacunaciones obligatorias violan derechos individuales o principios religiosos. Desde entonces, campañas contra la vacunación han dado como resultado daños innecesarios y muertes en masa.

En 2019, la Organización Mundial de la Salud catalogó a estos grupos de radicales anti-vacunas como una de las principales amenazas a la salud mundial. Quede claro “Mientras los brotes de sarampión están aumentando entre grupos de niños no vacunados en Estados Unidos, principalmente en los estados de Washington, Nueva York y Texas, un nuevo y extenso estudio publicado esta semana no encontró ninguna relación entre la vacuna contra el sarampión y el autismo, razón a la que con frecuencia aluden los padres para rechazarla”, hay que recordar la migración de las personas de nuestro estado hacia esos lugares del vecino de norte… ¡Por Amor vacuna a tus hijos!

Post eventum vani sunt questus “cuando aparece el necio todo son problemas”.

tomymx@me.com