Estimado lector, el tema que abordo el día de hoy, es sobre los pueblos indígenas de México y la población afromexicana, tema del que ya había escrito con anterioridad. Pensaba en ese momento, que sería una cuestión obligada a tratar por los candidatos a la Presidencia por México, ello debido a los distintos ángulos que la distinguen: el político, la diversidad y la deuda histórica con los pueblos indígenas y afromexicanos de México.
El tema de la diversidad es de relevancia en los ámbitos sociales de todo el mundo.
En México coexisten diversas culturas indígenas. México es un país multicultural y pluriétnico conformado por los pueblos indígenas, originarios de una tierra, con costumbres, lenguas y culturas propias, además de que los pueblos indígenas conservan y aprovechan los recursos naturales, lo que posiciona a México, después de Indonesia, en el segundo lugar entre los seis países con mayor diversidad cultural y biológica del mundo y es uno de los países con mayor diversidad cultural, natural y lingüística del mundo.
La población actual de México es de 129.197.074.
De acuerdo con el INE, cito, “En nuestro país hoy en día 23.2 millones de personas se AUTOIDENTIFICAN indígenas”, lo que significa que son casi el 18% de la población total.
Sin embargo, entiendo, que la población total en hogares indígenas IDENTIFICADOS en el territorio nacional en 2020 fue de 11,800, 247 personas, lo que equivale a 9.4 % de la población total del país.
Referente a la población de afromexicanos, es de 2,576,213 personas. Esta cifra corresponde al prácticamente 2% de la población total.
(En el año 2020 poco más del 50% de la población afromexicana se concentra en seis entidades: 303, 923 viven en Guerrero; 296,264 en el Estado de México; 215,435 en Veracruz de Ignacio de la Llave; 194,474 en Oaxaca; 186,914 en Ciudad de México y; 139,676 en Jalisco).
Entiendo de manera muy sencilla entonces, que el 20% de la población total la conforman indígenas y afromexicanos.
Bajo la premisa de que: La lista nominal contiene a toda la población que solicitó su inscripción al Padrón en territorio nacional y extranjero, y cuentan ya con su Credencial para Votar vigente; Que el Padrón Electoral se encuentra en la numeralia de toda la población que solicitó su inscripción al mismo en territorio nacional y extranjero con la finalidad de obtener su Credencial para Votar con fotografía y su derecho al voto.
Me fue imposible localizar el porcentaje de indígenas y afromexicanos que cuentan con Credencial para Votar. Ello, es comprensible, quizá, por la separación geográfica de las distintas comunidades de pobladores y por la topografía del lugar en donde viven.
En otras palabras, no sabemos con certeza el total de cuantos indígenas y afromexicanos van a ejercer su derecho a votar. Subrayo el valor electoral que representan los pueblos indígenas de México, al menos para mí, de momento es incierto. Pero sí sé, que su valor electoral, quizá, solo quizá, pueda ser significativo.
En términos políticos, aún persiste la vigencia del compromiso del Estado Mexicano por saldar la deuda histórica con los pueblos indígenas para el ejercicio de su libre determinación y autonomía, sin soslayar su bienestar y prosperidad ahora y para el futuro con las nuevas tecnologías acorde con su cultura, así como los retos en los ámbitos de los derechos humanos, medioambiente, desarrollo, educación y salud.
Por otro lado, debo admitir que, por una identificación natural, la candidata por la Presidencia de México, Xóchitl Gálvez es la que más ha concurrido, y no de ahora, sino por años, a las zonas indígenas aportando grandes beneficios para la población. Es cierto, no hay dudas y los testimonios están a la vista. Es de comprender que la otra candidata por la Presidencia de México, Claudia Sheinbaum, en este sentido tal vez y solo tal vez, tenga una desventaja.
Sea en el sentido que sea y con quien sea, deseo que la población indígena y de afromexicanos, después de esta contienda, la deuda se salde. ¡Hasta la próxima!
