Sería un retroceso, desaparecer el tipo penal de feminicidio
Gertz Manero propuso eliminar el tipo penal de feminicidio, a las y los diputados de Morena. El que el delito de feminicidio se contemplara en la ley fue una lucha de muchos años de las feministas.
Existe la instrucción por parte de la Corte y de la Comisión Nacional de Seguridad de investigar cualquier muerte violenta de mujeres como feminicidio.
Alejandro Getz Manero, fiscal general de la República, está proponiendo a las y los diputados de Morena, desaparecer el tipo penal de feminicidio para reclasificarlo como homicidio agravado; lo cual sería un retroceso en la legislación mexicana.
El tipificar el homicidio de mujeres por razón de género como feminicidio en México llevó años de lucha de organizaciones de la sociedad civil y feministas y este asunto va más allá, pues la Corte y la Comisión Nacional de Seguridad ordenaron a las fiscalías de todos los estados que cualquier muerte de mujeres, incluyendo el suicidio, lo anterior surgió del feminicidio de Mariana Lima, que las autoridades consideraron suicidio por la información recabada de su esposo y gracias a lucha de la madre de Mariana, se logró saber que había sido asesinada por su esposo y que éste lo quiso hacer pasar como suicidio para librarse de la cárcel.
El fiscal general de México, no tiene facultad para enviar una iniciativa de ley en ningún tema, por ello se reunió con la fracción mayoritaria de la Cámara de Diputados, para que las y los integrantes lleven a cabo este proceso legislativo.
Al eliminar el delito de feminicidio significaría un retroceso en cuanto a los derechos humanos de las mujeres, que desgraciadamente podría obtener la aprobación ya que el fiscal está proponiendo lo anterior con las y los legisladores que actualmente tienen la mayoría y además que pertenecen al partido en el poder.
Alejandro Gertz Manero dice que esa modificación a la ley se justifica porque es difícil determinar jurídicamente cuándo una mujer ha sido asesinada por el hecho de ser mujer; lo que hace evidente que el fiscal del país ignora el protocolo para juzgar con perspectiva de género, donde la Suprema Corte de Justicia de la Nación reúne todas las normas jurídicas tanto internacionales como nacionales que se aplican durante un proceso que incluya mujeres.
Desde 2012 el Código Penal Federal estableció en su Artículo 325 el delito de feminicidio para quien “prive de la vida a una mujer por razones de género” y en él se establecen las características que debe tener un homicidio para considerarse “en razón de género” como son: Signos de violencia sexual, antecedentes de maltrato, relaciones sentimentales previas, amenazas, incomunicación de la víctima o exhibicionismo del cuerpo de la víctima, extrema crueldad, entre otras.
Cabe mencionar que después de 2012 se fue incluyendo en los códigos penales de los Estados.
En este tema, la feminista Marcela Lagarde, fue quien acuñó el término de feminicidio en nuestro país y además elaboró la iniciativa y la sacó adelante; la idea es que en los feminicidios existan penas de 40 a 60 años de cárcel y el criminal pierde derechos relacionados con la víctima como los sucesorios y se prevé que en caso de no acreditarse el feminicidio se juzgara con las reglas del homicidio. O sea, no hay ningún riesgo a que el delincuente quede libre.
El tema salió a relucir a raíz de que en nuestro país se debate la redacción de un Código Penal Único para toda la República y en ese contexto la reunión del fiscal general con las diputadas y los diputados de Morena, éste expuso su punto de vista. “Explicó que los feminicidios eran un delito complicado para los ministerios públicos”; olvidando que hay otros problemas más graves que resolver en torno a la labor del o el Ministerio Público, como son subirles el sueldo y aumentar la cantidad.
El delito de feminicidio es importante ya que visibiliza la violencia en un contexto de machismo; en sí el odio hacia las mujeres manifestado en un homicidio.
No olvidemos que en México mueren 10 mujeres al día por causas machistas y por ello se deben de investigar con perspectiva de género.