El 10 de mayo se conmemoró en México el “Día de las madres”, promovido actualmente como “Día de la Maternidad Libre y Voluntaria”; esta fecha nos permite reflexionar en torno a la maternidad desde un punto de vista de derechos, libertades, autonomía, diversidad y autodeterminación de los cuerpos de las mujeres.
La feminista Martha Acevedo afirma en una investigación que hizo, en torno a la creación en 1922 del “Día de las madres”, que ésta fue una reacción conservadora en respuesta y para silenciar el feminismo que inicio en Yucatán en 1916, año en que se efectuó un congreso feminista que ya se hablaba de la maternidad elegida y del uso de los anticonceptivos; recuerde también fue en 1922 que ya se empezó a impulsar la educación sexual en nuestro país. Todo esto propicio que los grupos conservadores, como eran el periódico Excélsior y la misma iglesia católica, promovieran esta celebración.
Aun con los avances del feminismo se sigue fomentando la creencia de que tener hijos es el destino de todas las mujeres, así también se le asignan las actividades del hogar y de cuidado, también se promueve que las madres deben ser sacrificadas y abnegadas; este tipo de maternidad va en contra de los derechos de las mujeres, principalmente los sexuales y reproductivos.
La maternidad es decisión de las mujeres, y actualmente muchas deciden no serlo (las Nomo, no mother ) y siguen un plan de vida distinto; la maternidad es una opción no una imposición; la idea es eliminar los estereotipos culturales que provocan en las mujeres el sentimiento de culpa y el pensamiento de que si no son madres no se realizan como mujeres.
En México existe un monumento a la madre desde 1949, construido en el gobierno de Miguel Alemán, éste fue destruido por un sismo en 2017 y reinaugurado en 2018; fue instalado con el mismo objetivo de seguir manteniendo el pensamiento de que el destino de toda mujer es ser madre.
Este monumento tiene una placa que dice “A la que nos amó antes de conocernos”; en 1998 las feministas colocaron otra placa que dice: “Porque su maternidad fue voluntaria”.
Así se ha llegado el tiempo de maternidades libres, voluntarias, autónoma, diversa e informada; de ser madre cuando estés lista y así lo quieras; o de no ser madre en el ejercicio de tu libertad y obtener una vida plena como profesionista, servidora pública o como mejor te parezca honrando así el derecho a decidir de las mujeres sobre su propio cuerpo.