/ martes 8 de septiembre de 2020

Percepción ciudadana

Deja vu de la política


Periodismo es publicar lo que alguien no quiere que publiques. Todo lo demás son relaciones publicas.- George Orwell

En la política del país los hechos y las sorpresas son cotidianos. Sólo aquí en Durango se detiene en tiempo. El Bicentenario rinde su cuarto informe y es pródigo en publicidad.

La austeridad que impone la pandemia y la crisis económica no se observa, no hay antecedente de contratar tantos segmentos de publicidad en Milenio, Pedro Ferríz y otros medios de prensa y electrónicos. No se justifica que suprimir los invitados al informe, las vallas de confetis y los banquetes, se canalizaran más recursos a la prensa nacional, de por sí, aquí no paran en gastos.

A partir de esta semana ya se puede sintonizar la televisión comercial de la ciudad porque varios días sólo repetían el informe y loas al gobernador, no hay memoria de una crítica que la hayan hecho al mandatario en turno, de su informe se difunden datos inconexos. En horas previas al informe se anuncian cambios en el gobierno con la renuncia -así se dijo- de dos funcionarios, y se formaliza a otro de hecho ya ejercía el cargo.

Fueron más las disculpas a los que se fueron sin mención de motivo alguno al ser un acto publicitado, que los méritos de los entrantes. Este gobierno como ningún otro, no tiene plan programático socializado, la gobernabilidad es débil y la gobernanza no identifica al aparato de gobierno. De tal forma pensamos que al gobierno que iba a ser de alternancia, fuera de artificios electorales los nuevos funcionarios sólo le echaran otra pala de arena a la administración con cede en el Bicentenario.

Luego se declaró que los funcionarios deberán estar en la calle más que en sus oficinas, como andan las cosas pensamos que serían menos caros en sus oficinas, se ahorrarían gastos en las camionetas de lujo, los ayudantes y guardaespaldas que acostumbran en el Gobierno de Estado. En la prensa local claro que no faltaron reporteros amigos del erario siguiendo el libreto, incienso y lisonja a los nuevos funcionarios y un “análisis concienzudo” de la estrategia de los cambios hechos por el gobernador.

Del cuarto informe del gobierno de cambio verdadero, el que juró sería distinto no han nada que aplaudir, al contrario, se anuncian como mérito propio sin serlo, que tenemos la primera reserva forestal, la segunda cuenca lechera, el segundo en producción de oro y plata, la gran explotación minera, segundo lugar en ganadería, niveles que ya teníamos y que no son obra del Bicentenario, de este o los de atrás que hicieron gestiones debidas no suficientes de los laureles del éxito.

Ningún programa de impacto al sector agropecuario, a la industria, o en los servicios comerciales distorsionados. El actual gobierno sabía los retrasos de Durango, de rutinas, inercias frente al cambio, pasividad y conformismo. Antecedentes que obstaculizan cualquier plan de gobierno, y hoy la externalidad fortuita y adversa de crisis sanitaria y económica le suma grados al conflicto, aunque hay autoridades que la aprovechan para retardar resultados o encubrir incompetencias.

Gobernar Durango es muy difícil, la mentalidad y cortoplacismo de actores y grupos políticos o empresarios es renuente a los cambios y más si son de envergadura. El Bicentenario fuera de las campañas electorales y los cargos públicos conocerá a los durangueños, su idiosincrasia, sus prejuicios y nobleza. Se le reconoce trabajo en obras para oficinas, en un hospital y clínicas con apoyo de la federación, pero no hemos avanzado, al contrario, ¿cuál cambio dicen que se ve?

Se abonó una falsa expectativa en el gobierno del verdadero cambio, dijera Shakespeare o Recasens Sichés: El camino al infierno está empedrado de buenas intenciones. Al Bicentenario le aguarda una etapa muy dura de transparencia y rendición de cuentas, que se hará sentir cual marabunta porque no ha trascendido la austeridad de López Obrador, porque no se responde a los rumores de aviadores, consejeros y otras partidas.

Cabe hacer un paréntesis: Una opinión realista de Elier Flores cuando era dirigente empresarial, al conocerse de la austeridad de la 4T con recortes y la pandemia encima, se pronunció por una actitud hacia adelante, que la difícil situación fuera una oportunidad y se emprendieran acciones propias y audaces, y dejar de andar pidiendo como el Estado a la Federación, que dejáramos el paternalismo y dependencia de exclusiva del centro. Vale.

Determinación y coraje en la senadora Margarita Valdez, advirtiendo que se opondrá radicalmente al funcionamiento de la planta de arsénico Chemour en Gómez Palacio, amenaza para salud de la región. El gobernador fue a poner la primera piedra hace tres años.

Llegó en helicóptero dentro de un cordón de policías estatales y del Ayuntamiento de Leticia Herrera para bloquear a los vecinos inconformes con la prepotencia conocida. Primera piedra con bombo y platillo burlando las protestas de los habitantes, problema del que no se han escuchado a las autoridades de aquí o de allá.

Deja vu de la política


Periodismo es publicar lo que alguien no quiere que publiques. Todo lo demás son relaciones publicas.- George Orwell

En la política del país los hechos y las sorpresas son cotidianos. Sólo aquí en Durango se detiene en tiempo. El Bicentenario rinde su cuarto informe y es pródigo en publicidad.

La austeridad que impone la pandemia y la crisis económica no se observa, no hay antecedente de contratar tantos segmentos de publicidad en Milenio, Pedro Ferríz y otros medios de prensa y electrónicos. No se justifica que suprimir los invitados al informe, las vallas de confetis y los banquetes, se canalizaran más recursos a la prensa nacional, de por sí, aquí no paran en gastos.

A partir de esta semana ya se puede sintonizar la televisión comercial de la ciudad porque varios días sólo repetían el informe y loas al gobernador, no hay memoria de una crítica que la hayan hecho al mandatario en turno, de su informe se difunden datos inconexos. En horas previas al informe se anuncian cambios en el gobierno con la renuncia -así se dijo- de dos funcionarios, y se formaliza a otro de hecho ya ejercía el cargo.

Fueron más las disculpas a los que se fueron sin mención de motivo alguno al ser un acto publicitado, que los méritos de los entrantes. Este gobierno como ningún otro, no tiene plan programático socializado, la gobernabilidad es débil y la gobernanza no identifica al aparato de gobierno. De tal forma pensamos que al gobierno que iba a ser de alternancia, fuera de artificios electorales los nuevos funcionarios sólo le echaran otra pala de arena a la administración con cede en el Bicentenario.

Luego se declaró que los funcionarios deberán estar en la calle más que en sus oficinas, como andan las cosas pensamos que serían menos caros en sus oficinas, se ahorrarían gastos en las camionetas de lujo, los ayudantes y guardaespaldas que acostumbran en el Gobierno de Estado. En la prensa local claro que no faltaron reporteros amigos del erario siguiendo el libreto, incienso y lisonja a los nuevos funcionarios y un “análisis concienzudo” de la estrategia de los cambios hechos por el gobernador.

Del cuarto informe del gobierno de cambio verdadero, el que juró sería distinto no han nada que aplaudir, al contrario, se anuncian como mérito propio sin serlo, que tenemos la primera reserva forestal, la segunda cuenca lechera, el segundo en producción de oro y plata, la gran explotación minera, segundo lugar en ganadería, niveles que ya teníamos y que no son obra del Bicentenario, de este o los de atrás que hicieron gestiones debidas no suficientes de los laureles del éxito.

Ningún programa de impacto al sector agropecuario, a la industria, o en los servicios comerciales distorsionados. El actual gobierno sabía los retrasos de Durango, de rutinas, inercias frente al cambio, pasividad y conformismo. Antecedentes que obstaculizan cualquier plan de gobierno, y hoy la externalidad fortuita y adversa de crisis sanitaria y económica le suma grados al conflicto, aunque hay autoridades que la aprovechan para retardar resultados o encubrir incompetencias.

Gobernar Durango es muy difícil, la mentalidad y cortoplacismo de actores y grupos políticos o empresarios es renuente a los cambios y más si son de envergadura. El Bicentenario fuera de las campañas electorales y los cargos públicos conocerá a los durangueños, su idiosincrasia, sus prejuicios y nobleza. Se le reconoce trabajo en obras para oficinas, en un hospital y clínicas con apoyo de la federación, pero no hemos avanzado, al contrario, ¿cuál cambio dicen que se ve?

Se abonó una falsa expectativa en el gobierno del verdadero cambio, dijera Shakespeare o Recasens Sichés: El camino al infierno está empedrado de buenas intenciones. Al Bicentenario le aguarda una etapa muy dura de transparencia y rendición de cuentas, que se hará sentir cual marabunta porque no ha trascendido la austeridad de López Obrador, porque no se responde a los rumores de aviadores, consejeros y otras partidas.

Cabe hacer un paréntesis: Una opinión realista de Elier Flores cuando era dirigente empresarial, al conocerse de la austeridad de la 4T con recortes y la pandemia encima, se pronunció por una actitud hacia adelante, que la difícil situación fuera una oportunidad y se emprendieran acciones propias y audaces, y dejar de andar pidiendo como el Estado a la Federación, que dejáramos el paternalismo y dependencia de exclusiva del centro. Vale.

Determinación y coraje en la senadora Margarita Valdez, advirtiendo que se opondrá radicalmente al funcionamiento de la planta de arsénico Chemour en Gómez Palacio, amenaza para salud de la región. El gobernador fue a poner la primera piedra hace tres años.

Llegó en helicóptero dentro de un cordón de policías estatales y del Ayuntamiento de Leticia Herrera para bloquear a los vecinos inconformes con la prepotencia conocida. Primera piedra con bombo y platillo burlando las protestas de los habitantes, problema del que no se han escuchado a las autoridades de aquí o de allá.

ÚLTIMASCOLUMNAS
martes 14 de noviembre de 2023

Percepción Ciudadana

¿Quién al mando?

Leobaldo García Orrante

martes 31 de octubre de 2023

Percepción Ciudadana

Son raras las conciencias que se resisten a los huracanes.- Edgar Morin

Leobaldo García Orrante

martes 24 de octubre de 2023

Percepción Ciudadana

Cotidianidad y claroscuros, visibles y ocultos

Leobaldo García Orrante

martes 17 de octubre de 2023

Percepción Ciudadana

Conjetura y evidencias

Leobaldo García Orrante

martes 10 de octubre de 2023

Percepción Ciudadana

Condiciones disímbolas

Leobaldo García Orrante

martes 03 de octubre de 2023

Percepción Ciudadana

No hay noticia más vieja que la del periódico de ayer

Leobaldo García Orrante

martes 26 de septiembre de 2023

Percepción Ciudadana

La retórica de la dependencia

Leobaldo García Orrante

martes 19 de septiembre de 2023

Percepción Ciudadana

Campañas, campos definidos y deslindes

Leobaldo García Orrante

martes 05 de septiembre de 2023

Percepción Ciudadana

Ansiada espera Hay pequeñas mentiras, grandes mentiras, y las encuestas.- Mark Twain

Leobaldo García Orrante

martes 29 de agosto de 2023

Percepción Ciudadana

El verdadero Poder Ejecutivo en México es el poder de compras, de contratos, de concesiones.- Gabriel Zaid

Leobaldo García Orrante

Cargar Más