Cuando menos en Durango, la política ha tratado mal a las mujeres

La comisión de responsabilidades que encabeza el híbrido diputado llanero (perredista-priista) Carmen Fernández Padilla, decidió que sí debe actuarse en juicio de procedencia en contra de la presidenta de Nazas, Diana Berenice González Torres.

Por cierto, la señora ignorante de las leyes, sin duda, cree que presionando se va a escapar; primero hizo un acto de agresión en Paso Nacional y ayer vino a presionar al Congreso del Estado.

Pues siendo así, más le vale buscar un arreglo, pero me temo que de presidenta municipal ya no va a seguir.

Cuando menos en Durango, la política ha tratado mal a las mujeres, veamos: a la de Nazas, se suma la de Tlahualilo, Judith Rodríguez, que anda en problemas con los dineros y que también cree que por ser mujer se les va a escapar.

A éstas se suma la de Cuencamé, Elizabeth Sotelo, que trae problemas con laudos laborales.

La de Vicente Guerrero, Juanita Acevedo, que es mal vista entre sus conciudadanos.

Y la de Peñón Blanco, Rita Lozano, que tiene que responder de un laudo que favorece a los trabajadores, que reclaman salarios y aunque el asunto es penal, se puede convertir y revertirse en su contra si no atiende este asunto.

Se escapa sin que tenga muchos problemas, la de Poanas, Araceli Aispuro, que lo único que le afecta es el apellido.

Martín Vivanco Lira, dirigente del partido Movimiento Ciudadano (MC), esta vez sí verá su presencia en la Cámara de Diputados porque:

Ya se registró y lo más seguro es que a la mayoría le va a buscar la plurinominal como primero en la lista.

Y si la mayoría no la gana, que está muy carajo, la plurinominal seguro que le llega, porque Movimiento Ciudadano en esta vez sí va a sacar el porcentaje mínimo requerido para el registro.

Un día sí y otro también el presidente demuestra su desprecio por la sociedad civil y su favoritismo al Ejército.

Ahora ya les otorgó en la administración otros tres aeropuertos.

Le concedemos en parte la razón al Presidente, entre la sociedad civil, para donde quiera que voltee, sólo encuentra corrupción,

Y en el Ejército no hay tanta.

Ahora ya sacó la punta el Presidente de crear un organismo para juzgar a los jueces.

En los hechos, ya existe esta inutilidad que se llama Consejo de la Judicatura, que sirve para dos cosas:

Para nada y para pura.

Que son los encargados de jalarles las orejas a los jueces cuando incurran en alguna omisión.

Pero como son de los mismos, nunca proceden.

Pasa lo mismo que en las oficinas de procesos internos de las policías, nunca proceden.

No es más que el dinero que se tira en ellos.