Además del tema de infraestructura en las escuelas, todas las instituciones en el estado, están obligadas a tener un fácil acceso de entrada, salida, así como brindar los servicios educativos para niños que presenten alguna discapacidad o trastorno mental, así lo manifestó Ofelia Godínez de la Rocha, directora de Participación Social de la Secretaría de Educación del Estado de Durango (SEED).
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Aseguró que en lo que va del inicio del ciclo escolar 2023-2024, no se tiene ningún reporte de discriminación o por no permitir el ingreso a un menor a clases, porque los directivos no tienen la facultad de hacer eso, “al revés, niños que lleguen con una situación especial, son atendidos”, y si no tienen un diagnóstico, se les manda a hacer, para que informe su médico si hay tratamiento y den las recomendaciones.
En realidad es un trabajo entre padres y maestros, para que se pueda desarrollar de mejor manera su educación didáctica y pedagógica. Cada niño que presente una discapacidad debe contar con el diagnostico, porque muchas veces las mamás no saben exactamente qué es lo que tiene el menor, hay padecimientos muy diferentes, por eso se apoyan con el Materno Infantil y el Hospital Psiquiátrico con paidosiquiatras para que se les otorgue el dialogístico, recomendaciones de su médico, y como se le puede apoyar, las recomendaciones pedagógicas.
En el caso de alguna discapacidad física, “las instrucciones para el director o supervisor” de cada escuela, es dar las facilidades para el acceso para la alumna o alumno, que cuenten con las rampas que se necesitan, incluso próximamente se va a implementar en las escuelas, un programa para detectar en donde hacen falta rampas.
En todas las escuelas de verdad, los directivos están conscientes de que si se cuenta con un niño con discapacidad, su salón debe destinarse a un espacio de fácil acceso, o el más cercano a la puerta de ingreso, para que no tenga problema.
La directora afirmó “que hay inclusión en todas las escuelas”, y los propios compañeros, o maestros apoyan a los niños con discapacidad, sobre todo porque contagian a sus salones de energía, y las ganas de salir adelante.
Indicó que aún no se puede determinar cuanta es la matrícula de niños que tienen alguna discapacidad en Durango, porque sigue el proceso de inscripción, aunque en la mayoría ya tiene una población definida.