/ martes 12 de noviembre de 2019

Lula

El líder que dejó el poder con el mayor porcentaje de apoyo de la población de su país, cercano al 90%, todo mundo sabía que es inocente, y hay fiesta internacional por su liberación porque nunca debió haber sido encarcelado.

Nelson Mandela es otro líder que dejó el poder con un alto porcentaje de apoyo de su pueblo, después de haber estado en la cárcel 27 años.

Y el otro es López Obrador que también andaba llegando al 90% de aprobación popular, en el ambiente difícil de la política mundial.

Son tres personalidades excepcionales en un ambiente en el que no es fácil encontrar líderes respetables. Tres carreras en diferentes latitudes con un mismo fin: Crear las condiciones para mejorar las vidas de millones de personas, en un movimiento mundial del que acaban de sacar a Evo Morales, porque aunque parezca un lugar común, la CIA no descansa, y los EUA nunca han dejando de meterle millones a su Central de Inteligencia.

De acuerdo con Andrés Manuel en qué “benditas redes sociales”, pero cuidado, pueden ser manipuladas para aplastarte.

Hemos padecido una carencia de líderes y los EUA se han aplicado en contra de los pocos que han surgido. En el caso de Mandela, él optó por retirarse y no por la reelección, pero los EUA e Inglaterra no pudieron con él ni con 27 años de cárcel y les acabó ganando la presidencia pero no sé aferró al poder.

En esta gran racha de elecciones terminamos el año con las de la República Oriental del Uruguay, cuyo país transformó el otro gran líder latinoamericano Pepe Mujica, donde se definirá la nueva Presidencia el domingo 24 de noviembre, pero lo que sigue es Lula recorriendo su país en una ola de entusiasmo que se desató en todo Brasil con su liberación, ya que allá en realidad ganó Lula y no Bolsonaro, y sería una locura que se atrevieran a meterlo a la cárcel de nuevo, porque siempre se supo que es inocente de los supuestos delitos que le inventaron, como también lo hicieron con Dilma, injustamente destituida de la Presidencia.

Lula es una figura muy querida precisamente por su honradez y precisamente por eso su liberación provocó inmediatamente una fiesta internacional, porque estamos mencionando a figuras influyentes internacionalmente, como es el caso de Andrés Manuel, que lo respeta desde Donald Trump y es invitado a todas partes.

México es otro en el mundo a partir del planteamiento en la campaña por Andrés Manuel López Obrador de la cuarta transformación del país, con el apoyo para llegar a ganar en especial entre otros de Tatiana Clouthier y Alfonso Romo, suceso que ha sido muy bien recibido en el mundo.

Aquí lo interesante es que los éxitos de unos son también éxitos de los otros, como lo demuestra la reacción ante la liberación de Lula.

Y para cerrar el año, todo esto no nos impedirá estar atentos al laberinto español.