/ lunes 18 de noviembre de 2019

‘Maestros por México’ pide a AMLO elecciones equitativas en el SNTE

El día 14 de noviembre del presente año, los “Maestros X México”, enviaron al Presidente de la República un documento, que se ha convertido en un detonante, que sin duda viene a cimbrar los intereses mezquinos de la dirigencia nacional, que acostumbrada a disponer a discreción de todos los recursos económicos del SNTE para imponerse y prolongarse por tiempo indefinido.

La legitimidad de dicha exigencia, nos inspira a pensar que han dado un tiro certero en la parte más vulnerable del cacicazgo sindical, que es el manejo a discreción de las cuotas, donde la mayor parte pasa a sus bolsillos y el resto para financiar la grilla de sus allegados, para que les cubran todas las tropelías y sus patrañas continúen. Por eso, la banderilla que le han clavado al toro de la corrupción del SNTE, sin duda que los ha puesto a temblar y no es de frío.

De entrada dicho documento contiene tres puntos torales, donde el primero destaca que la actual dirigencia impostora, no debe disponer del presupuesto del SNTE durante el proceso de selección de la dirigencias tanto nacional como estatales. Lo que conlleva a entender que las cuentas que pertenecen al sindicato deben ser congeladas, para que ningún miembro del interior pueda hacer mal uso de ellas, ya que dada la cultura del pillaje y de la transa que impera en el haber de las dirigencias, ninguna atadura de manos sería ofensiva, si medimos el tamaño de los hurtos con el volumen de sus puños.

Pero además de la congelación de cuentas, debe declararse la veda electoral de la gestión, porque en las elecciones del SNTE, a cualquier nivel siempre han sido permeadas por incentivos perversos, producto de una forma de pensar que distorsiona la democracia. Y ahí vemos múltiples formas de pagarle a un maestro para que vote por el candidato oficial; el cual accede bajo la promesa de un préstamo, de una intervención para que su hijo adquiera alguna plaza o en su defecto un cambio de lugar del presunto elector. De ahí que el cinismo mutuo, acepta que es apropiado o válido convertir al sindicato y las elecciones en instrumentos de uso y ganancia.

En el segundo punto, enfatiza la creación de un Comité Nacional de Elecciones, integrado por miembros designados por el INE. Lo que nos permite ponderar que dicha petición es muy trascendente, dado el objetivo que persigue en el sentido de que el Comité Nacional y por ende los estatales, saquen las manos del proceso electoral y que la más mínima intervención sea sancionada severamente. Porque para nadie es desconocida la historia truculenta que siempre han empleado para designar a sus incondicionales, bajo la cultura de la imposición y la simulación.

En el tercer punto, solicitan la integración de un Padrón Nacional de Maestros con Derecho a Votar. Dicha demanda en automático denuncia las irregularidades a que están sometidos los actuales esquemas de votación; iniciando con la actitud fraudulenta en que incurren los pillos que presiden las asambleas delegacionales, quienes descaradamente acuden a infinidad de marrullerías, para alterar o acomodar el padrón para que les cuadre en la dirección que les permita sacar ventaja. De ahí que con la emisión de un padrón debidamente elaborado y consensado, vendría a dar confiabilidad y transparencia a cualquier nivel de elección.

Con el planteamiento de estos tres puntos, la corriente de Maestros X México, sintetiza la fuerza de su mensaje y que su cometido va en serio, ya que el documento que envían al presidente no finca su importancia en el tamaño de la hazaña, sino el contenido que lo mueve, porque están decididos a superar cualquier obstáculo que intente frenar la idea de democratizar al SNTE y aseguran que así como mandaron a la calle a un seudo dirigente de pacotilla, lo mismo harán con el usurpador Alfonso Cepeda.

Al analizar dicho documento, se identifican inmediatamente las razones profundas por las que les urge que el presidente acelere el paso, respecto al compromiso que adquirió en el sentido de democratizar las organizaciones sindicales, sobre todo en aquellas de las que ha recibido un número creciente de quejas y agravios, donde ya se han visto caer los primeros bandidos del sindicalismo, sostenidos bajo el autoritarismo de las prácticas priistas y que ahora como tema del pasado se encuentra en capilla el liderazgo del SNTE, que corresponde al capricho de la imposición, motivada únicamente por el manejo deshonesto de las cuotas millonarias que han sido siempre el talón de Aquiles.

Saben que las cosas no se han detenido por la falta de esfuerzo, sino de la voluntad torcida de los usurpadores, que han acudido a toda clase de maniobras para permanecer por encima de las nuevas reglas. Sin embargo, el llamado que hacen al presidente no es para presionarlo, sino para ponerle límites a la falta de representatividad y mecanismos democráticos en la toma de decisiones. De ahí que con hechos concretos van acreditando la seriedad, profundidad y la perseverancia de este esfuerzo.

No se necesita analizar mucho para entender que esa lucha abandera el propósito de la justicia y estamos viendo que los compañeros de Maestros X México, lo van logrando. Vemos aquí en Durango al maestro Julián Salvador Reyes y su equipo, luchando tenazmente contra el escepticismo del magisterio; luchando contra las descalificaciones de los acomodaticios, condición que no le arredra, porque cada día se van viendo hechos que van acreditando su trabajo.

Trabajo que no es tan sencillo, pero que se debe seguir haciendo, porque ahí se ven miles de trabajadores sin acceso a la justicia que les haga valer los derechos más simples: Miles de maestros observando como unos avanzan con toda la protección sindical, mientras otros la perciben como algo lejano e incomprensible. Intentando entender actitudes turbias de los dirigentes que no proveen claridad necesaria para interpretar qué se debe hacer o qué pasó si las cuotas son parejas.

Y ahí pasmados, detenidos, sin la oportunidad que los dirigentes brindan a sus familiares, o hijos de sus amigos o queridas. Absortos y aturdidos por no saber a dónde acudir, con quién hablar, qué hacer para obtener cuando menos una atención de calidad. Ahí, atrapados en un laberinto de líderes de bajísimo perfil profesional y pésima calidad moral, cuyas lindezas matizan con los malos modos.

Así, en ese contexto se mueven los maestros huérfanos de una real defensa, que los expone siempre al pago de coyotes que les cobran cantidades despiadadas, por convertir su derecho en un favor que no están dispuestos a ofrecer de a gratis. Por eso el SNTE ahora más que nunca se ha convertido en un cártel sindical de la corrupción. Abocado no a defender, sino a ofender; abocado no a facilitar la ayuda, sino a negársela a aquel que carece de plata o asidero.

La tarea no es fácil, pero tampoco imposible, pese a que los enemigos más acérrimos y los mamíferos más feroces del SNTE se han unido por la consigna de sobrevivir. Cosa que los ha turbado y les ha impedido darse cuenta que con su comportamiento no hacen más que empoderar a Maestros X México, cuya corrupción sindical, ha sido el motivo fundacional que los llevó a constituirse en frente político.

El día 14 de noviembre del presente año, los “Maestros X México”, enviaron al Presidente de la República un documento, que se ha convertido en un detonante, que sin duda viene a cimbrar los intereses mezquinos de la dirigencia nacional, que acostumbrada a disponer a discreción de todos los recursos económicos del SNTE para imponerse y prolongarse por tiempo indefinido.

La legitimidad de dicha exigencia, nos inspira a pensar que han dado un tiro certero en la parte más vulnerable del cacicazgo sindical, que es el manejo a discreción de las cuotas, donde la mayor parte pasa a sus bolsillos y el resto para financiar la grilla de sus allegados, para que les cubran todas las tropelías y sus patrañas continúen. Por eso, la banderilla que le han clavado al toro de la corrupción del SNTE, sin duda que los ha puesto a temblar y no es de frío.

De entrada dicho documento contiene tres puntos torales, donde el primero destaca que la actual dirigencia impostora, no debe disponer del presupuesto del SNTE durante el proceso de selección de la dirigencias tanto nacional como estatales. Lo que conlleva a entender que las cuentas que pertenecen al sindicato deben ser congeladas, para que ningún miembro del interior pueda hacer mal uso de ellas, ya que dada la cultura del pillaje y de la transa que impera en el haber de las dirigencias, ninguna atadura de manos sería ofensiva, si medimos el tamaño de los hurtos con el volumen de sus puños.

Pero además de la congelación de cuentas, debe declararse la veda electoral de la gestión, porque en las elecciones del SNTE, a cualquier nivel siempre han sido permeadas por incentivos perversos, producto de una forma de pensar que distorsiona la democracia. Y ahí vemos múltiples formas de pagarle a un maestro para que vote por el candidato oficial; el cual accede bajo la promesa de un préstamo, de una intervención para que su hijo adquiera alguna plaza o en su defecto un cambio de lugar del presunto elector. De ahí que el cinismo mutuo, acepta que es apropiado o válido convertir al sindicato y las elecciones en instrumentos de uso y ganancia.

En el segundo punto, enfatiza la creación de un Comité Nacional de Elecciones, integrado por miembros designados por el INE. Lo que nos permite ponderar que dicha petición es muy trascendente, dado el objetivo que persigue en el sentido de que el Comité Nacional y por ende los estatales, saquen las manos del proceso electoral y que la más mínima intervención sea sancionada severamente. Porque para nadie es desconocida la historia truculenta que siempre han empleado para designar a sus incondicionales, bajo la cultura de la imposición y la simulación.

En el tercer punto, solicitan la integración de un Padrón Nacional de Maestros con Derecho a Votar. Dicha demanda en automático denuncia las irregularidades a que están sometidos los actuales esquemas de votación; iniciando con la actitud fraudulenta en que incurren los pillos que presiden las asambleas delegacionales, quienes descaradamente acuden a infinidad de marrullerías, para alterar o acomodar el padrón para que les cuadre en la dirección que les permita sacar ventaja. De ahí que con la emisión de un padrón debidamente elaborado y consensado, vendría a dar confiabilidad y transparencia a cualquier nivel de elección.

Con el planteamiento de estos tres puntos, la corriente de Maestros X México, sintetiza la fuerza de su mensaje y que su cometido va en serio, ya que el documento que envían al presidente no finca su importancia en el tamaño de la hazaña, sino el contenido que lo mueve, porque están decididos a superar cualquier obstáculo que intente frenar la idea de democratizar al SNTE y aseguran que así como mandaron a la calle a un seudo dirigente de pacotilla, lo mismo harán con el usurpador Alfonso Cepeda.

Al analizar dicho documento, se identifican inmediatamente las razones profundas por las que les urge que el presidente acelere el paso, respecto al compromiso que adquirió en el sentido de democratizar las organizaciones sindicales, sobre todo en aquellas de las que ha recibido un número creciente de quejas y agravios, donde ya se han visto caer los primeros bandidos del sindicalismo, sostenidos bajo el autoritarismo de las prácticas priistas y que ahora como tema del pasado se encuentra en capilla el liderazgo del SNTE, que corresponde al capricho de la imposición, motivada únicamente por el manejo deshonesto de las cuotas millonarias que han sido siempre el talón de Aquiles.

Saben que las cosas no se han detenido por la falta de esfuerzo, sino de la voluntad torcida de los usurpadores, que han acudido a toda clase de maniobras para permanecer por encima de las nuevas reglas. Sin embargo, el llamado que hacen al presidente no es para presionarlo, sino para ponerle límites a la falta de representatividad y mecanismos democráticos en la toma de decisiones. De ahí que con hechos concretos van acreditando la seriedad, profundidad y la perseverancia de este esfuerzo.

No se necesita analizar mucho para entender que esa lucha abandera el propósito de la justicia y estamos viendo que los compañeros de Maestros X México, lo van logrando. Vemos aquí en Durango al maestro Julián Salvador Reyes y su equipo, luchando tenazmente contra el escepticismo del magisterio; luchando contra las descalificaciones de los acomodaticios, condición que no le arredra, porque cada día se van viendo hechos que van acreditando su trabajo.

Trabajo que no es tan sencillo, pero que se debe seguir haciendo, porque ahí se ven miles de trabajadores sin acceso a la justicia que les haga valer los derechos más simples: Miles de maestros observando como unos avanzan con toda la protección sindical, mientras otros la perciben como algo lejano e incomprensible. Intentando entender actitudes turbias de los dirigentes que no proveen claridad necesaria para interpretar qué se debe hacer o qué pasó si las cuotas son parejas.

Y ahí pasmados, detenidos, sin la oportunidad que los dirigentes brindan a sus familiares, o hijos de sus amigos o queridas. Absortos y aturdidos por no saber a dónde acudir, con quién hablar, qué hacer para obtener cuando menos una atención de calidad. Ahí, atrapados en un laberinto de líderes de bajísimo perfil profesional y pésima calidad moral, cuyas lindezas matizan con los malos modos.

Así, en ese contexto se mueven los maestros huérfanos de una real defensa, que los expone siempre al pago de coyotes que les cobran cantidades despiadadas, por convertir su derecho en un favor que no están dispuestos a ofrecer de a gratis. Por eso el SNTE ahora más que nunca se ha convertido en un cártel sindical de la corrupción. Abocado no a defender, sino a ofender; abocado no a facilitar la ayuda, sino a negársela a aquel que carece de plata o asidero.

La tarea no es fácil, pero tampoco imposible, pese a que los enemigos más acérrimos y los mamíferos más feroces del SNTE se han unido por la consigna de sobrevivir. Cosa que los ha turbado y les ha impedido darse cuenta que con su comportamiento no hacen más que empoderar a Maestros X México, cuya corrupción sindical, ha sido el motivo fundacional que los llevó a constituirse en frente político.