En la gráfica del índice físico de la actividad económica del Estado de Durango, como la publica el INEGI, nuestra economía parece un tobogán que desciende durante seis trimestres consecutivos.
Desciende a partir del primer trimestre del 2017, luego del punto de actividad económica más alto logrado en el último trimestre del 2016, año éste de acelerado crecimiento.
Con cifras desestacionalizadas, durante el segundo trimestre del 2018 la actividad productiva o económica del estado cae en una tasa de (-) 0.2%. Hay catorce Estados que caen más que Durango, luego hay 17 con mejor desempeño.
Con las mismas cifras que eliminan la estacionalidad, a tasa anual, es decir comparando el segundo trimestre de este 2018 contra igual trimestre del 2017, la economía de Durango cae al (-) 1.9%. Durango es el quinto de mayor caída a tasa anual.
De los últimos seis trimestres de esta administración, a partir de enero a marzo del 2017, en dos, el primero y el segundo del 2017, ha ocurrido crecimiento anual, pero de menor tasa anual que los mismos trimestres del 2016. En cuatro, del tercero del 2017 al segundo del 2018, la tasa anual ha sido negativa, es decir ha ocurrido caída en la actividad económica de Durango.
Con las cifras originales, sin eliminar la estacionalidad, que son usadas para comparar periodos largos, a tasa anual, el segundo trimestre del 2018 sobre igual trimestre del 2017, la economía del estado decrece en (-) 0.4%. Somos en ese trimestre -segundo del 2018- la sexta entidad con peor desempeño económico del país. Pero ya no somos la tercera peor, como ocurrió en el primer trimestre de este año.
Para verlo con optimismo, usando cifras originales, no muy recomendadas para medir plazos cortos, la economía estatal sí logra crecer entre el primero y el segundo trimestre del 2018 y lo hace a una tasa de + 4.1% entre un trimestre y el otro. Por lo menos podemos decir que el segundo trimestre de este 2018 tuvo un desempeño económico mejor que el primer trimestre de este año.
Sin embargo, el nivel físico de nuestra actividad económica, enero a marzo 2018, de 105.9% (su base es 2013=100%), es aún ligeramente inferior al de hace dos años; el del segundo trimestre del 2016 fue de 106.2%. En dos años hemos caído en el volumen físico de nuestra actividad productiva en un tercio de punto porcentual, (-) 0.3%.
Ampliemos el espectro más allá de esta Administración. Del año base del índice, 2013, al segundo trimestre del 2018, en los últimos cinco años, nuestro estado es el segundo en el país por peor desempeño económico, sólo atrás de Zacatecas. Lo anterior, en buena media, por el mal desempeño de los últimos doce meses; julio del 2017, a junio del 2018.
A tasa anual, II trimestre del 2018, el sector primario crece en Durango al + 0.5%, medio punto porcentual en un año. El sector secundario o industrial cae al (-) 5.5% a tasa anual. El sector terciario o de servicios, crece al + 1.9%, también a tasa anual.
Dentro del sector secundario o industrial, la construcción, como lo han advertido las redes sociales, decrece al (-) 25% a tasa anual. La minería lo hace al (-) 2.4%. Las manufacturas, que incluyen a las maquiladoras, crecen al + 4.4% a tasa anual. Todo en el II trimestre de este 2018.
El Comercio de nuestro Estado, al por mayor y por menor, decrece a tasa anual al cerrar el segundo trimestre de este año en (-) 5.9% y es el segundo de peor caída anual en el país, sólo después de Tabasco. “Está duro el abarrote”, dicen los comerciantes de Durango. ¿Cerrarán más calles del Centro Histórico durante noviembre y diciembre, para el cemento hidráulico?
Los resultados de ocupación y empleo de septiembre de este año, recién publicados, refuerzan el serio deterioro económico que ha sufrido Durango en los últimos doce meses. La desocupación -gente que busca y no encuentra empleo- en la entidad fue la segunda más alta del país, de 5.1%; sólo después de la de Tabasco, con 7.3%.
Estos datos de desocupación de septiembre, último mes del tercer trimestre del año, no anticipan un mejor desempeño económico durante julio, agosto y septiembre...y ya estamos terminando octubre, entre fiestas, cantos, cuetes, e inundaciones.
Urge un cambio radical, un golpe de timón que cambie la realidad económica de nuestro estado. El lunes primero de noviembre, al amparo de Todos los Santos, se presenta un Estudio de Gran Visión; uno más de los ya elaborados en lo que va de este siglo. Todos bajo iniciativa del empresariado de la entidad. Ninguno ha estado mal elaborado, como no lo estará el que se presente el primero de noviembre.
No es solamente un asunto de Gran Visión de los ciudadanos, de los empresarios, de los académicos. Es, sobre todo, un asunto de Gran Visión, de voluntad política, de amor por Durango, de sus gobernantes.
Que Todos los Santos nos ayuden a sacar a Durango de este tobogán de decrecimiento económico y nos pongan en la ruta de una gran transformación para lograr desarrollo con justicia social, en México y en Durango.
