/ sábado 11 de mayo de 2024

Leobaldo García Orrante, in memoriam

“Ciertos recuerdos son como amigos comunes”

- Marcel Proust


Una infausta noticia se dio a conocer el pasado en la comunidad intelectual, académica, universitaria y política de Durango: el pasado 9 de abril falleció el extraordinario escritor, analista y pensador duranguense Leobaldo García Orrante, una de las mejores plumas de nuestra entidad y un excelente conductor de televisión en el canal público TV UJED.

El maestro Leobaldo ha pasado a un mejor plano, pero en este mundo terrenal extrañaremos sus lúcidas ideas, propuestas, conversaciones y diálogos que hicieron época en nuestra entidad, al ser justamente el tipo de espacios que necesitamos para la reflexión sobre la democratización, el mejoramiento de la vida pública y la satisfacción de nuestros derechos y libertades. Por supuesto, no debe pasar desapercibida su faceta como líder estudiantil y después como profesor universitario por varias décadas en nuestra querida Universidad Juárez del Estado de Durango, en las que forjó generaciones enteras, tanto en la carrera de Derecho como en la de Ciencias Políticas.

En estas mismas páginas de El Sol de Durango, García Orrante publicó por años su imprescindible columna “Percepción Ciudadana”, en la cual desmenuzaba los acontecimientos políticos del momento pero criticaba la toma de decisiones con independencia de la ideología, los colores partidistas o los gobernantes en turno. “Percepción Ciudadana”, en efecto, se convirtió en un punto de inflexión para el análisis del poder, la clase política y los hechos que a todas y todos nos deben importar. Escrita con un estilo claro pero igualmente elegante, esta columna fue un nicho de libertad donde el maestro Leobaldo diseccionó la cosa pública, las instituciones y los personajes que forjan a esas instituciones. Toda una bocanada de aire fresco en tiempos convulsos: los de la inacabada transición a la democracia en México.

La Reforma del Estado, los procesos de transformación, el estilo personal de gobernar -Cosío Villegas dixit-, la emergencia de las izquierdas en México hasta su ulterior llegada al Poder Ejecutivo fueron, entre muchos otros, algunos de los temas que le ocuparon y le preocuparon a nuestro personaje, y a los cuales dedicó numerosas páginas de su prosa ágil, bien fundamentada y bien sustentada.

Así como destacó redactando, Don Leobaldo condujo igualmente por varios años un excelente programa de conversaciones y análisis de la vida jurídico-política de nuestro país: “Universidad y Desarrollo”, el cual, como ya decíamos, vio la luz, venturosamente, en TV UJED. Con invitadas e invitados de distintos sectores de la vida colectiva duranguense, entre los cuales tuve la enorme fortuna de estar por numerosas emisiones, “Universidad y Desarrollo” fungió como una genuina incubadora de crítica, creatividad política e inventiva legislativa. Así como sucedió en sus escritos para El Sol de Durango, en su espacio televisivo prevaleció en todo momento la libertad de expresión y, sobre todo, el rigor en cuanto a la fundamentación de todos los asertos, aseveraciones y afirmaciones que ahí se llegaron a pronunciar.

En lo personal, durante los último quince años construí una entrañable amistad con el maestro Leobaldo, relación afectiva heredera de la que igualmente tuvo por muchas décadas con mi padre. Entre los tres intercambiábamos puntos de vista y predicamos la admiración mutua. Qué mejor manera de honrar al maestro García Orrante que reivindicando la esfera de libertad que siempre lo caracterizó. Lo extrañaremos en demasía pero fue un honor conocerlo, leerlo y dialogar constructivamente con él. Descanse en paz.

“Ciertos recuerdos son como amigos comunes”

- Marcel Proust


Una infausta noticia se dio a conocer el pasado en la comunidad intelectual, académica, universitaria y política de Durango: el pasado 9 de abril falleció el extraordinario escritor, analista y pensador duranguense Leobaldo García Orrante, una de las mejores plumas de nuestra entidad y un excelente conductor de televisión en el canal público TV UJED.

El maestro Leobaldo ha pasado a un mejor plano, pero en este mundo terrenal extrañaremos sus lúcidas ideas, propuestas, conversaciones y diálogos que hicieron época en nuestra entidad, al ser justamente el tipo de espacios que necesitamos para la reflexión sobre la democratización, el mejoramiento de la vida pública y la satisfacción de nuestros derechos y libertades. Por supuesto, no debe pasar desapercibida su faceta como líder estudiantil y después como profesor universitario por varias décadas en nuestra querida Universidad Juárez del Estado de Durango, en las que forjó generaciones enteras, tanto en la carrera de Derecho como en la de Ciencias Políticas.

En estas mismas páginas de El Sol de Durango, García Orrante publicó por años su imprescindible columna “Percepción Ciudadana”, en la cual desmenuzaba los acontecimientos políticos del momento pero criticaba la toma de decisiones con independencia de la ideología, los colores partidistas o los gobernantes en turno. “Percepción Ciudadana”, en efecto, se convirtió en un punto de inflexión para el análisis del poder, la clase política y los hechos que a todas y todos nos deben importar. Escrita con un estilo claro pero igualmente elegante, esta columna fue un nicho de libertad donde el maestro Leobaldo diseccionó la cosa pública, las instituciones y los personajes que forjan a esas instituciones. Toda una bocanada de aire fresco en tiempos convulsos: los de la inacabada transición a la democracia en México.

La Reforma del Estado, los procesos de transformación, el estilo personal de gobernar -Cosío Villegas dixit-, la emergencia de las izquierdas en México hasta su ulterior llegada al Poder Ejecutivo fueron, entre muchos otros, algunos de los temas que le ocuparon y le preocuparon a nuestro personaje, y a los cuales dedicó numerosas páginas de su prosa ágil, bien fundamentada y bien sustentada.

Así como destacó redactando, Don Leobaldo condujo igualmente por varios años un excelente programa de conversaciones y análisis de la vida jurídico-política de nuestro país: “Universidad y Desarrollo”, el cual, como ya decíamos, vio la luz, venturosamente, en TV UJED. Con invitadas e invitados de distintos sectores de la vida colectiva duranguense, entre los cuales tuve la enorme fortuna de estar por numerosas emisiones, “Universidad y Desarrollo” fungió como una genuina incubadora de crítica, creatividad política e inventiva legislativa. Así como sucedió en sus escritos para El Sol de Durango, en su espacio televisivo prevaleció en todo momento la libertad de expresión y, sobre todo, el rigor en cuanto a la fundamentación de todos los asertos, aseveraciones y afirmaciones que ahí se llegaron a pronunciar.

En lo personal, durante los último quince años construí una entrañable amistad con el maestro Leobaldo, relación afectiva heredera de la que igualmente tuvo por muchas décadas con mi padre. Entre los tres intercambiábamos puntos de vista y predicamos la admiración mutua. Qué mejor manera de honrar al maestro García Orrante que reivindicando la esfera de libertad que siempre lo caracterizó. Lo extrañaremos en demasía pero fue un honor conocerlo, leerlo y dialogar constructivamente con él. Descanse en paz.