/ miércoles 22 de junio de 2022

PECDA: Una oportunidad cultural en tiempos Covid

Una de las oportunidades mejor aprovechadas respecto a los hacedores de cultura en Durango, direccionada por el gobierno federal y socializada en esta entidad federativa por el Instituto de Cultura del Estado de Durango, sin duda, lo fue el Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico, por sus siglas PECDA.

Recientemente acudí al Museo Nacional Francisco Villa a recibir mi constancia como becario en el rubro de Creadores con Trayectoria, en la disciplina de literatura, presentando el ensayo biográfico “Tomás Urbina de bandido a revolucionario”. En Durango, bien atendido y correspondido el programa por la experiencia de Gloria Villarreal.

La idea central del proyecto presentado es fomentar la doctrina de la durangueñeidad, considerando su significado como un rasgo que va más allá del gentilicio, y que nos identifica a los que exaltamos a Durango, contagiándonos de una identidad excepcional en el contexto geográfico que implica el ser durangueño. Es decir, durangueñeidad es y será el puente que conduce del desarraigo de nuestras raíces y costumbres a una identidad como sociedad con profundos cimientos culturales. Tomás Urbina es un personaje de la historia que con sus defectos y virtudes nos ha brinda conocimiento de la historia de la Revolución duranguense.

Mi idea fundamental del proyecto presentado a través de PECDA, fue elaborar un ensayo biográfico del referido revolucionario durangueño, Tomás Urbina, promoviendo así el arraigo y la identidad durangueña, convocando a la reflexión y al análisis sustentado en las acciones revolucionarias de Urbina a nivel local y nacional.

Quiero destacar que el conocimiento de nuestros personajes de la historia local, nos permite posicionar el interés de la sociedad por una cultura y un turismo regional, y con ello coadyuvar al esfuerzo gubernamental.

La vocación cultural de Durango, es revolucionaria, por el simple hecho de tener la fortuna de que en esta entidad federativa nació el célebre guerrillero de la Revolución Francisco Villa, y fueron muchos hombres quienes lo acompañaron como el general Tomás Urbina, con ese sello identitario, resulta una obligación de la autoridad cultural y educativa fomentar el conocimiento de los personajes que trascienden más allá de las fronteras estatales como es el caso de Tomás Urbina, y a mi juicio PECDA brinda esa oprtunidad tan anhelada y tan esperada.

En mi calidad de creador con trayectoria, es mi deber, dar a conocer la historia del estado de Durango, y qué mejor ocasión que a través de un proyecto cultural que no sólo financie dicho proyecto sino que estimule la creación literaria en quienes nos dedicamos desde hace más de 25 años, a la actividad literaria dentro de la crónica y la historia.

Una de las oportunidades mejor aprovechadas respecto a los hacedores de cultura en Durango, direccionada por el gobierno federal y socializada en esta entidad federativa por el Instituto de Cultura del Estado de Durango, sin duda, lo fue el Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico, por sus siglas PECDA.

Recientemente acudí al Museo Nacional Francisco Villa a recibir mi constancia como becario en el rubro de Creadores con Trayectoria, en la disciplina de literatura, presentando el ensayo biográfico “Tomás Urbina de bandido a revolucionario”. En Durango, bien atendido y correspondido el programa por la experiencia de Gloria Villarreal.

La idea central del proyecto presentado es fomentar la doctrina de la durangueñeidad, considerando su significado como un rasgo que va más allá del gentilicio, y que nos identifica a los que exaltamos a Durango, contagiándonos de una identidad excepcional en el contexto geográfico que implica el ser durangueño. Es decir, durangueñeidad es y será el puente que conduce del desarraigo de nuestras raíces y costumbres a una identidad como sociedad con profundos cimientos culturales. Tomás Urbina es un personaje de la historia que con sus defectos y virtudes nos ha brinda conocimiento de la historia de la Revolución duranguense.

Mi idea fundamental del proyecto presentado a través de PECDA, fue elaborar un ensayo biográfico del referido revolucionario durangueño, Tomás Urbina, promoviendo así el arraigo y la identidad durangueña, convocando a la reflexión y al análisis sustentado en las acciones revolucionarias de Urbina a nivel local y nacional.

Quiero destacar que el conocimiento de nuestros personajes de la historia local, nos permite posicionar el interés de la sociedad por una cultura y un turismo regional, y con ello coadyuvar al esfuerzo gubernamental.

La vocación cultural de Durango, es revolucionaria, por el simple hecho de tener la fortuna de que en esta entidad federativa nació el célebre guerrillero de la Revolución Francisco Villa, y fueron muchos hombres quienes lo acompañaron como el general Tomás Urbina, con ese sello identitario, resulta una obligación de la autoridad cultural y educativa fomentar el conocimiento de los personajes que trascienden más allá de las fronteras estatales como es el caso de Tomás Urbina, y a mi juicio PECDA brinda esa oprtunidad tan anhelada y tan esperada.

En mi calidad de creador con trayectoria, es mi deber, dar a conocer la historia del estado de Durango, y qué mejor ocasión que a través de un proyecto cultural que no sólo financie dicho proyecto sino que estimule la creación literaria en quienes nos dedicamos desde hace más de 25 años, a la actividad literaria dentro de la crónica y la historia.