Turismo de reuniones y convenciones tema ausente en campañas
A partir de ahora y hasta que la ley nos lo permita, abordaremos en este espacio, algunos temas que tradicionalmente son excluidos por las campañas electorales locales, aunque en este caso, (sobre todo), es evitado por las campañas de Legisladores.
Porque el turismo de reuniones, no pocas veces se confunde con el turismo político que resulta tan atractivo para los integrantes de los Congresos federal y locales, sin embargo, el primero es un eje potencial para el desarrollo de las regiones y capitales de los estados, mientras que el segundo es un lastre político que arrastran los presupuestos de las Cámaras legislativas, sean del Congreso de la Unión (es decir a nivel federal) o en los Congresos de los Estados, en donde se facturan millones de pesos a cargo de nuestros impuestos, para que los flamantes diputados vayan a pasearse a destinos europeos, asiáticos y del Caribe, sin que les cueste un solo centavo.
Empero a pesar de lo anterior, el turismo de reuniones es totalmente diferente al turismo político que practican los diputados y senadores, principalmente debido a que se incluyen reuniones de negocios, inversiones, sectores, entre muchas otras que han convertido a este tipo de turismo en una actividad altamente destacada, con miras a potenciar el desarrollo económico y por supuesto turístico, porque una reunión de negocios resulta una excelente oportunidad para conocer destinos que de otra forma no estarían en tu lista de lugares por conocer y el 27% de las personas que acuden a un lugar por trabajo, al poco tiempo regresan por placer si es que son bien tratados en cuanto a los servicios.
En nuestro país, (tan sólo entre 2014 y 2016) el sector creció cerca del 25% en el número de eventos realizados y 52% en el número de participantes y de acuerdo con el informe elaborado por el extinto Consejo de Promoción Turística (CPT) al que López Obrador le dio cristiana sepultura, el valor total de las reuniones en territorio mexicano se cifró en 25,000 millones de dólares (equivalente a cerca del 1.5 del Producto Interno Bruto a nivel nacional).
Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, tradicionalmente habían sido los destinos más elegidos del turismo de reuniones en territorio nacional, en mérito de su infraestructura turística, vuelos, carreteras, conexiones hoteleras, opciones de diversión (léase vida nocturna) entre otros factores, sin embargo, Mérida, Playa del Carmen, Chihuahua, Nayarit, la blanca Mérida y más recientemente Aguascalientes, se han incorporado a la competencia en este rubro de turismo, demostrando que sí se puede competir con los grandes, para atraer reuniones de todo tipo y de cualquier talla, que impliquen inversión y dejen dispersión de efectivo.
Nada más en Aguascalientes (por mencionarle a usted las cifras de uno de los estados), se propusieron competir en este segmento partiendo desde cero, para ello, conformaron la Oficina de Congresos y Visitantes (OCV), dedicada exclusivamente al turismo de reuniones en coordinación con la Secretaría de Turismo y la Asociación de Hoteles y Moteles (AHMA) de aquella entidad, se luchó ante el gobierno federal, se gestionó ante diputados federales y senadores, se plantaron ante los directivos de las aerolíneas y funcionarios de turismo, para instalar más vuelos nacionales e internacionales, pero con un cronograma de actividades en la mano, para que los vuelos no fueran inviables y poco atractivos para las aerolíneas y se creó un Fideicomiso de Promoción Turística, que fortaleciera la Oficina de Congresos y Visitantes, es decir, se puso la mesa.
¿El resultado? Hoy Aguascalientes ha multiplicado el número de turistas en cerca 90%, la generación de inversiones ha logrado alcanzar cifras muy positivas y la infraestructura indispensable para recibir a los turistas de negocios, continúa creciendo.
La Organización Mundial de Turismo define al turismo de negocios como “la agrupación temporal de un número incierto de personas en determinado lugar para llevar a cabo una actividad en particular, siendo los principales propósitos de dicha reunión, motivar a los participantes, conducir negocios, expandir ideas, capacitar socios, actividades que pueden efectuarse a través de Convenciones, Conferencias, Congresos Internacionales, ferias comerciales, exposiciones y trámites corporativos”.
Hoy por hoy en Aguascalientes, el turismo de reuniones y convenciones es un brazo fuerte de la economía, puesto que aumenta el número de turistas, genera recurso para fortalecer la infraestructura local, atrae turismo regional, nacional e internacional y fomenta las inversiones a mediano y largo plazo.
En Durango se tiene el potencial y se puede fortalecer este tipo de turismo, pero para ello, debemos trabajar juntos, no dejarle todo el peso al gobierno del estado, las presidencias de las capitales de los municipios deben sumarse a este reto, empero principalmente la de la capital del estado, el próximo alcalde de la capital, debe ser un hombre capaz de aliar objetivos comunes, sumar esfuerzos y convocar liderazgos, para que muy pronto, Durango alcance una mayor conectividad y competitividad en este segmento del turismo.
Es muy raro que seamos sede de reuniones nacionales o convenciones internacionales, a los turistas les cuesta mucho llegar a nuestra tierra y eso debe cambiar, las campañas electorales en acto, deben comenzar a hablar también de estos temas, no sólo de mejorar seguridad o servicios que es lo más utilizado en la oferta de los candidatos.
Por ello lo invito a que reflexionemos nuestro voto, Gonzalo ya estuvo y Durango no cambió, a Otniel no le hemos escuchado una sola propuesta de campaña y la verdad ya le queda muy poco tiempo como para abanderarse de alguna y creo que la contienda se polarizará entre Jorge Salum y José Ramón Enríquez, cualquiera de ellos podría ganar. Agradeciéndole el favor de su lectura, le patento mis mejores deseos en este Día de la Madre, aprovechando para felicitar a doña Socorrito, implorando múltiples bendiciones en su día.
