En el Mes de la Patria a la par que los eventos conmemorativos se ha desatado un torbellino político-judicial por las acusaciones de “delincuencia organizada” que dispara la Fiscalía General de la República contra 31 miembros del Foro Científico y Tecnológico, organismo que ha venido recibiendo financiamiento del CONACyT.
En ese debate público han intervenido, académicos y personajes de la política, y analistas políticos en los medios de comunicación. En la oleada también el presidente López Obrador, el líder del Senado y la jefa de gobierno de la CDMX.
En este escenario me refiero a dos instituciones de gran trascendencia en la vida nacional; la SEP que el próximo 3 de octubre celebrará el centenario de su fundación –por el presidente Álvaro Obregón y José Vasconcelos– ; y el CONACyT que en diciembre de 2021 rememoró el medio siglo de su creación, por iniciativa del presidente Luis Echeverría, a propuesta del secretario de Educación, Víctor Bravo Ahuja, quien expuso sus objetivos y estructura en su comparecencia del 15 de diciembre de 1970 en la Cámara de Diputados. Fue la primera institución creada en el marco del proceso de reforma educativa integral que se puso en marcha en el sexenio 1970-1976.
Trayectoria de la SEP. En 100 años, con 20 presidentes de la República, 68 intelectuales, académicos y políticos han sido secretarios de Educación Pública. El Ing. Víctor Bravo Ahuja fue el número 20, durante el sexenio del presidente Luis Echeverría Álvarez.
Ahora me ocupo de la obra educativa de Bravo Ahuja y del proceso de reforma educativa integral, planeado, consensado, con visión de futuro y con soporte jurídico-legislativo, institucionalizado en la Ley Federal de Educación (1973) y en la Ley Nacional de Educación para Adultos (1975). Y de las instituciones trascendentes: Uno. La Universidad Autónoma Metropolitana, UAM. Una nueva Universidad erigida por el Estado pero con autonomía.
Dos. Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería y Ciencias Sociales y Administrativas del IPN, UPIICSA.
Tres. Sistema Nacional de Institutos Tecnológicos Regionales. Se crearon 29 que sumados a los 19 existentes, hicieron posible que todos los estados de la República contasen con instituciones de educación técnica superior de la SEP.
Cuatro. Colegio de Bachilleres. Creado como organismo descentralizado, surgió a la par que la UAM para atender la fuerte demanda de educación media superior que impactaba la UNAM y el IPN. Se convirtió en un sistema nacional de enseñanza media superior.
Cinco. Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE). Se creó vinculado al sector empresarial para “fomentar el financiamiento complementario a la educación. Transformado, constituyó un sistema eficaz de escuelas comunitarias de la SEP.
Seis. Sistema Nacional de Enseñanza técnica de la SEP. En el sexenio se incrementaron de 289 a 1302. El sistema estuvo encuadrado en la Subsecretaría de Enseñanza Media, Técnica y Superior. La integraron escuelas de educación secundaria, capacitación para el trabajo, de enseñanza media superior y de tipo superior.
Siete. Universidad Autónoma de Chapingo por Ley el 30 de diciembre de 1974, la antigua Escuela Nacional de Agricultura de Chapingo se transformó en Universidad Autónoma.
Ocho. Formación de profesores. La reforma educativa en las escuelas normales que formaban a los profesores de educación básica. Impulsó la profesionalización del magisterio y conforme lo dispuesto por la Ley Federal de Educación la formación de profesores fue considerada de tipo superior, estableciéndose en un proceso gradual, las licenciaturas de educación preescolar, primaria y secundaria, en las escuelas Normales formaban profesores siguiendo planes de estudio que tenían como antecedente el bachillerato.
Nueve. Plan Nacional de Educación para Adultos. Se puso en marcha el 19 de enero de 1976 como una acción culminante del proceso de reforma educativa, dirigido a la población que entonces tenía una escolaridad de menos de nueve años.
Se orientó a la población de 15 años que no habían terminado la primaria y la secundaria y a los analfabetas. El promedio de escolaridad en 1975 era de 3.6 años.
