Raúl Muñoz de León siempre ha sido un apasionado de su tierra, por lo que a través de las páginas de su libro "Reflexiones libres desde la Laguna”, hace un recuento no sólo de su vida, sino del pensamiento y las acciones que desde su perspectiva forman parte de los hechos que cambiaron esta región del país.
Formó parte del equipo de la Secretaria General de Gobierno como Subsecretario de Gobierno en la Comarca Lagunera cuando me tocó ser el titular de la dependencia en el periodo de 2001 al 2004, una vez que concluyó su labor como Presidente de la Gran Comisión del Congreso del Estado.
Raúl es un hombre de experiencia en el servicio público, colaborador en los tres órdenes de gobierno, donde se ha desempeñado a lo largo de su vida en diferentes áreas, como Delegado de la Secretaria de Comercio y Fomento Industrial, Director de la Casa de la Cultura y Secretario del Ayuntamiento en Gómez Palacio, entre otros cargos más. También ha destacado como colaborador en medios de comunicación y se ha desempeñado como docente en instituciones educativas.
Licenciado en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México, es un egresado ejemplar del Instituto 18 de Marzo, por lo que su perspectiva aguda hace de su libro un análisis reflexivo sobre el entorno lagunero.
De esta manera, podemos ver a través de sus páginas su carácter franco y directo como buen lagunero, por lo que entre los temas que trata Raúl se encuentra la familia, los amigos, los compañeros de la escuela y el vecindario todos, con un estilo crítico y festivo, porque como lo señala en su propio libro, "hay que vivir la vida hay que vivirla con alegría reírnos de las penalidades, la vida es demasiado importante como para tomarla en serio".
De su familia heredó el gusto por la literatura la poesía y la oratoria, su madre tenía un diario que entonces se llamaban "de cuatro manos", que contenía poemas manuscritos de autores de diversas nacionalidades, lo que le dio oportunidad de platicar de las composiciones literarias de Amado Nervo. Manuel Acuña, Ramón López Velarde o Ricardo López Méndez.
Decidió ser abogado para defender a los pobres de los poderosos y opresores, siempre bajo el consejo de su abuela, que para triunfar en la vida hay que saber las reglas comenzar por conocer a los hombres, por lo que es necesario aprender a distinguir los mentirosos de los sinceros y los falsos de los auténticos como los leales de los traicioneros, y en ocasiones hay que confiar, pero también hay que dudar para estar seguros de lo que hacemos.
Forjado en la brega diaria en la Ciudad de México en busca de mejores oportunidades y estudiar la Universidad, donde disfrutó de la Casa de Estudios al desempeñar un oficio, nutrirse en la fuente de la cultura, el arte y el deporte,además de contar con un círculo de amigos, con los que fomentó la solidaridad y de quienes aún goza de estimación.
En el ámbito político Muñoz de León da cuenta en su libro que en 1980 la pluralidad llego a Durango con la integración de un Poder Legislativo plural con diputados de los partidos Revolucionario Institucional, Acción Nacional, Comunista Mexicano, Auténtico de la Revolución Mexicana y Popular socialista, donde me tocó presidir la Gran Comisión del Congreso del Estado.
Hace referencia de los hombres y mujeres que han hecho grande a esta región y hace un recuento de sus compañeros y amigos, con lo que abre el espacio para emprender una reflexión crítica sobre lo que ha sucedido en las últimas décadas.
Para él la vida es un juego, pero hay que saber jugar. Así es el amigo Raúl Muñoz de León, un lagunero de cepa.
