/ sábado 27 de julio de 2019

Ahora sí el PRI sacará al demócrata que siempre han llevado dentro

Hoy el PRI tiene a todo el mundo sorprendido. Quién iba a imaginar que los tricolores pudieran guardar por más de 80 años, al demócrata que siempre llevaron dentro. Mientras se dieron cuenta de ello, le dieron “vuelo a la hilacha” haciendo todo lo contrario: Un partido de estado, que dio origen por mucho tiempo, a gobiernos autoritarios. Un presidencialismo cercano a la divinidad con poder meta constitucional, y lo más irónico y paradójico, políticamente hablando el PRI nunca ha ganado las elecciones en las urnas, el PRI es, resumiendo en pocas palabras: La historia del fraude.

Pero hoy, que están pagando los errores que históricamente han cometido, amenazan con regresar ahora sí, con la bandera de la democracia, la cual nunca ejercieron. Al menos así lo han manifestado quienes pretenden convertirse en el próximo presidente del PRI nacional, incluidos entre otros Ulises Ruiz, al que pretenden dejar fuera de la jugada. En el PRI siempre es lo mismo, hablan de unidad cuando esta no existe. Cuando ganaban todo hablaban de un candidato de unidad, falso, siempre fue impuesto desde Los Pinos. Los tricolores siempre han confundido la sumisión con la lealtad, a la democracia con el “dedazo”, a la gimnasia con la magnesia y a chana con Feliciana.

Recientemente estuvieron en Durango dos candidatos a dirigir al PRI Nacional, Ivon Ortega y Alejandro Moreno Cárdenas. La primera lo intenta por segunda vez y Moreno Cárdenas, el llamado candidato oficial de Peña Nieto y hasta de AMLO, anda en busca del voto libre y secreto de la militancia. Ivon Ortega se manifiesta en contra del grupo Atlacomulco; Moreno Cárdenas le revira, que ella representa el factor para dividir al PRI y que él en cambio es símbolo de unidad. Afirma el campechano que a su partido le urge regresar a Palacio Nacional, y él, el candidato que le garantiza a los priistas ganar la mayoría en el Congreso en 2021 y la Presidencia de la República en 2024. Nada más falta que de una buena vez, el INE le entregue la constancia de mayoría.

Moreno Cárdenas opina también que los tricolores locales obtuvieron una victoria histórica en las pasadas elecciones, y que por eso son la segunda fuerza del estado. Como el PRI ya viene de regreso, la alternancia que se olvide de seguir despachando en el Bicentenario. No cabe duda que el brillante candidato de Peña Nieto podría ser maestro de Ciencias Políticas en una de las mejores universidades del mundo. Define al gobierno del presidente López Obrador como una “ocurrencia”, que no ha hecho nada, y por eso le urge regresar al PRI porque ellos no fueron gobierno de ocurrencias. ¿Entonces por qué perdieron la presidencia en el año 2000 y 2018? Claro que el PRI regresará, pero primero tendrá que hacer fila, porque es posible que el PAN sea quien regrese en 2024 a la Presidencia de México.

Hoy el PRI tiene a todo el mundo sorprendido. Quién iba a imaginar que los tricolores pudieran guardar por más de 80 años, al demócrata que siempre llevaron dentro. Mientras se dieron cuenta de ello, le dieron “vuelo a la hilacha” haciendo todo lo contrario: Un partido de estado, que dio origen por mucho tiempo, a gobiernos autoritarios. Un presidencialismo cercano a la divinidad con poder meta constitucional, y lo más irónico y paradójico, políticamente hablando el PRI nunca ha ganado las elecciones en las urnas, el PRI es, resumiendo en pocas palabras: La historia del fraude.

Pero hoy, que están pagando los errores que históricamente han cometido, amenazan con regresar ahora sí, con la bandera de la democracia, la cual nunca ejercieron. Al menos así lo han manifestado quienes pretenden convertirse en el próximo presidente del PRI nacional, incluidos entre otros Ulises Ruiz, al que pretenden dejar fuera de la jugada. En el PRI siempre es lo mismo, hablan de unidad cuando esta no existe. Cuando ganaban todo hablaban de un candidato de unidad, falso, siempre fue impuesto desde Los Pinos. Los tricolores siempre han confundido la sumisión con la lealtad, a la democracia con el “dedazo”, a la gimnasia con la magnesia y a chana con Feliciana.

Recientemente estuvieron en Durango dos candidatos a dirigir al PRI Nacional, Ivon Ortega y Alejandro Moreno Cárdenas. La primera lo intenta por segunda vez y Moreno Cárdenas, el llamado candidato oficial de Peña Nieto y hasta de AMLO, anda en busca del voto libre y secreto de la militancia. Ivon Ortega se manifiesta en contra del grupo Atlacomulco; Moreno Cárdenas le revira, que ella representa el factor para dividir al PRI y que él en cambio es símbolo de unidad. Afirma el campechano que a su partido le urge regresar a Palacio Nacional, y él, el candidato que le garantiza a los priistas ganar la mayoría en el Congreso en 2021 y la Presidencia de la República en 2024. Nada más falta que de una buena vez, el INE le entregue la constancia de mayoría.

Moreno Cárdenas opina también que los tricolores locales obtuvieron una victoria histórica en las pasadas elecciones, y que por eso son la segunda fuerza del estado. Como el PRI ya viene de regreso, la alternancia que se olvide de seguir despachando en el Bicentenario. No cabe duda que el brillante candidato de Peña Nieto podría ser maestro de Ciencias Políticas en una de las mejores universidades del mundo. Define al gobierno del presidente López Obrador como una “ocurrencia”, que no ha hecho nada, y por eso le urge regresar al PRI porque ellos no fueron gobierno de ocurrencias. ¿Entonces por qué perdieron la presidencia en el año 2000 y 2018? Claro que el PRI regresará, pero primero tendrá que hacer fila, porque es posible que el PAN sea quien regrese en 2024 a la Presidencia de México.