/ martes 19 de marzo de 2024

El valor de la amistad

El valor de la amistad es para muchos el más significativo que podemos llegar a tener en la vida, debido a que es un vínculo estrecho de afecto que formamos con otra persona, a la cual elegimos por convicción propia y le otorgamos un valor especial en nuestra vida.

De todas las relaciones interpersonales, la amistad es probablemente la que consideramos más libre, ya que nos deja establecer nuestras propias reglas, permitiendo que surja y se manifieste de muchas maneras y constituye una parte fundamental de nuestra vida ya que son muchos los beneficios que obtenemos a través de los vínculos de amistad que formamos con otras personas.

La amistad nos ha acompañado a lo largo de la historia ya que los humanos somos seres sociales que, por naturaleza, tendemos a agruparnos y establecer vínculos estrechos con personas que consideramos afines y con las que compartimos afectos y sentimientos.

La palabra amistad proviene del latin amicus que se traduce como 'amigo', y este término procede a su vez del verbo amare, que significa "amar", por lo que así, los seres humanos tenemos la necesidad natural de amar y ser amados y la amistad es un tipo de amor que nace cuando dos o más personas nos elegimos mutuamente y expresamos un afecto recíproco y desinteresado, que se nutre con el trato y las vivencias compartidas.

Es esa relación de afecto que se desarrolla de forma libre y particular, que nos hace sentir bien en compañía del otro y en la cual encontramos valores imprescindibles cómo la confianza, el respeto, la empatía, la lealtad, la sinceridad y el compromiso.

Los amigos son nuestros compañeros de vida, aquellos con los que disfrutamos en los momentos memorables, felices o divertidos y quienes en los momentos difíciles nos brindan comprensión, apoyo y cariño, convirtiéndose en esas personas de valor para nosotros a las que a veces consideramos nuestra "familia por elección".

La amistad es una relación mediante la cual buscamos de manera inconsciente crecer y completarnos buscamos personas que nos complementen y, sin darnos cuenta, alimentamos la creencia de que existe algo externo a nosotros que puede hacernos felices o infelices; cuando en realidad la persona que elegimos como amigo es solo un espejo de nosotros mismos.

Desde esta comprensión, un amigo es esa figura que funciona como un complemento o espejo a través del cual podemos conocernos mejor a nosotros mismos y que nos brinda la oportunidad de desarrollar e integrar aquellas características que proyectamos fuera de nosotros.

La amistad es uno de los valores más importantes que podemos enseñar a nuestros hijos e hijas, sobre todo si consideramos que los amigos son una fuente de apoyo emocional, nos hacen sentir felices y nos ayudan a crecer como personas a lo largo de nuestra vida.

Cualquier niño o niña podrá comprender qué significa tener un buen amigo o amiga, lo cual les permite a los más pequeños desarrollar habilidades sociales, crecer emocionalmente y sentirse apoyados y felices en su entorno.

La amistad no tiene fronteras, y debemos enseñar a nuestros hijos e hijas a aceptar y valorar la diversidad, debido a que cuando hacen amigos de diferentes orígenes, culturas y religiones abren su mente a otras realidades y aprenden valores como la igualdad.

La autoestima y la autoconfianza son fundamentales para establecer relaciones saludables con los amigos, se requiere de una actitud segura de nosotros mismos. Con la amistad, aprendamos también de las diferencias, que enriquecen la vida y debemos celebrarlas en lugar de temerlas, aprendamos de nuestros amigos y apreciemos sus cualidades.

El valor de la amistad es para muchos el más significativo que podemos llegar a tener en la vida, debido a que es un vínculo estrecho de afecto que formamos con otra persona, a la cual elegimos por convicción propia y le otorgamos un valor especial en nuestra vida.

De todas las relaciones interpersonales, la amistad es probablemente la que consideramos más libre, ya que nos deja establecer nuestras propias reglas, permitiendo que surja y se manifieste de muchas maneras y constituye una parte fundamental de nuestra vida ya que son muchos los beneficios que obtenemos a través de los vínculos de amistad que formamos con otras personas.

La amistad nos ha acompañado a lo largo de la historia ya que los humanos somos seres sociales que, por naturaleza, tendemos a agruparnos y establecer vínculos estrechos con personas que consideramos afines y con las que compartimos afectos y sentimientos.

La palabra amistad proviene del latin amicus que se traduce como 'amigo', y este término procede a su vez del verbo amare, que significa "amar", por lo que así, los seres humanos tenemos la necesidad natural de amar y ser amados y la amistad es un tipo de amor que nace cuando dos o más personas nos elegimos mutuamente y expresamos un afecto recíproco y desinteresado, que se nutre con el trato y las vivencias compartidas.

Es esa relación de afecto que se desarrolla de forma libre y particular, que nos hace sentir bien en compañía del otro y en la cual encontramos valores imprescindibles cómo la confianza, el respeto, la empatía, la lealtad, la sinceridad y el compromiso.

Los amigos son nuestros compañeros de vida, aquellos con los que disfrutamos en los momentos memorables, felices o divertidos y quienes en los momentos difíciles nos brindan comprensión, apoyo y cariño, convirtiéndose en esas personas de valor para nosotros a las que a veces consideramos nuestra "familia por elección".

La amistad es una relación mediante la cual buscamos de manera inconsciente crecer y completarnos buscamos personas que nos complementen y, sin darnos cuenta, alimentamos la creencia de que existe algo externo a nosotros que puede hacernos felices o infelices; cuando en realidad la persona que elegimos como amigo es solo un espejo de nosotros mismos.

Desde esta comprensión, un amigo es esa figura que funciona como un complemento o espejo a través del cual podemos conocernos mejor a nosotros mismos y que nos brinda la oportunidad de desarrollar e integrar aquellas características que proyectamos fuera de nosotros.

La amistad es uno de los valores más importantes que podemos enseñar a nuestros hijos e hijas, sobre todo si consideramos que los amigos son una fuente de apoyo emocional, nos hacen sentir felices y nos ayudan a crecer como personas a lo largo de nuestra vida.

Cualquier niño o niña podrá comprender qué significa tener un buen amigo o amiga, lo cual les permite a los más pequeños desarrollar habilidades sociales, crecer emocionalmente y sentirse apoyados y felices en su entorno.

La amistad no tiene fronteras, y debemos enseñar a nuestros hijos e hijas a aceptar y valorar la diversidad, debido a que cuando hacen amigos de diferentes orígenes, culturas y religiones abren su mente a otras realidades y aprenden valores como la igualdad.

La autoestima y la autoconfianza son fundamentales para establecer relaciones saludables con los amigos, se requiere de una actitud segura de nosotros mismos. Con la amistad, aprendamos también de las diferencias, que enriquecen la vida y debemos celebrarlas en lugar de temerlas, aprendamos de nuestros amigos y apreciemos sus cualidades.