/ domingo 17 de mayo de 2020

Grilla llanera

En la región de los llanos de Durango, lugar donde por muchos años ha sido considerado el granero del Estado, incluso alguien lo llego a calificar como el granero del país, vender un kilo de frijol por un productor en 15 pesos y comprarlo en 40, es poco más que una mentada de madre, ¿o no es cierto?

Le comento lo anterior porque hace unos días una persona de Ignacio Allende del municipio de Guadalupe Victoria, donde afortunadamente ya va pasando la pesadilla del Covid-19, solicito ayuda, esta ayuda consistía en comprar algunos víveres en la cabecera y hacérselos llegar hasta el cerco sanitario en la entrada de la comunidad, entre estos víveres que ocupaban eran unos cuatro o cinco kilos de frijol, este servidor con el apoyo de una alma caritativa de Cuencamé, nos dimos a la tarea de reunirle lo que ocupaba esta familia, reitero, su servidor busco el frijol primero en las tiendas de supermercado, a 48, 45 y lo más barato eran 40 pesos kilo, en algunas tiendas ampliamente reconocidas a nivel nacional había a 28 y hasta 32 pesos, pero se ve un frijol más viejo que la luna, estando en una tierra frijolera acudí a con los coyotes, quienes le agarraron el frijol al campesinos de los llanos en un máximo de 14 pesos kilo, lo más barato que conseguimos ese frijol fue a 28 pesos kilo, ahí es donde vemos que al campesino la verdad lo tienen pero bien fregado, su cosecha como tal no tiene un buen precio, pero si lo quiere comprar vale oro, y si es cierto, esto no es nuevo ni estamos descubriendo el hilo negro, tiene años pasando lo mismo, pasan y pasan gobiernos y las cosas siguen exactamente igual, el pobre que siga…… aguantando la crisis, total ya está acostumbrado, ¿o no es cierto?.

El año pasado pudimos dialogar con muchos agricultores, con verdaderos productores de frijol en la región de los llanos, los que siembran 150 o hasta más de 200 hectáreas, los que arriesgan todo su patrimonio para que la tierra produzca, el año 2019 fue muy malo para ellos, el peor de la historia, no llovió regularmente y eso causo un enorme daño a su economía, y para acabarla de moler se encontraron con las nuevas disposición del gobierno federal, que solo abra apoyo para los pequeños productores en el país, y aquí el problema es que en Durango, o en el norte de México los que tienen cinco o 10 hectáreas no las trabajan, las rentan o pasan al partido, simple y sencillamente porque no es costeable, porque los dueños ya son gente muy grande de edad, porque tienen años viviendo en los Estados Unidos, porque a los jóvenes hijo o nietos de ellos no les interesa el campo, vamos un gran porcentaje de verdadero productor este año ya no tiene pensado trabajar las tierras, sin apoyo no tiene caso, ni siquiera van a poder venderlo a precio oficial porque sobre pasan la cantidad de tierra que marca el programa federal, aun no inicia el ciclo, pero del Grillo se acuerda cuando vemos este fenómeno, este problema, menos gente trabajando la tierra y por ende más desempleo, si me equivoco me corrige por favor amigo lector, Hasta la próxima.

En la región de los llanos de Durango, lugar donde por muchos años ha sido considerado el granero del Estado, incluso alguien lo llego a calificar como el granero del país, vender un kilo de frijol por un productor en 15 pesos y comprarlo en 40, es poco más que una mentada de madre, ¿o no es cierto?

Le comento lo anterior porque hace unos días una persona de Ignacio Allende del municipio de Guadalupe Victoria, donde afortunadamente ya va pasando la pesadilla del Covid-19, solicito ayuda, esta ayuda consistía en comprar algunos víveres en la cabecera y hacérselos llegar hasta el cerco sanitario en la entrada de la comunidad, entre estos víveres que ocupaban eran unos cuatro o cinco kilos de frijol, este servidor con el apoyo de una alma caritativa de Cuencamé, nos dimos a la tarea de reunirle lo que ocupaba esta familia, reitero, su servidor busco el frijol primero en las tiendas de supermercado, a 48, 45 y lo más barato eran 40 pesos kilo, en algunas tiendas ampliamente reconocidas a nivel nacional había a 28 y hasta 32 pesos, pero se ve un frijol más viejo que la luna, estando en una tierra frijolera acudí a con los coyotes, quienes le agarraron el frijol al campesinos de los llanos en un máximo de 14 pesos kilo, lo más barato que conseguimos ese frijol fue a 28 pesos kilo, ahí es donde vemos que al campesino la verdad lo tienen pero bien fregado, su cosecha como tal no tiene un buen precio, pero si lo quiere comprar vale oro, y si es cierto, esto no es nuevo ni estamos descubriendo el hilo negro, tiene años pasando lo mismo, pasan y pasan gobiernos y las cosas siguen exactamente igual, el pobre que siga…… aguantando la crisis, total ya está acostumbrado, ¿o no es cierto?.

El año pasado pudimos dialogar con muchos agricultores, con verdaderos productores de frijol en la región de los llanos, los que siembran 150 o hasta más de 200 hectáreas, los que arriesgan todo su patrimonio para que la tierra produzca, el año 2019 fue muy malo para ellos, el peor de la historia, no llovió regularmente y eso causo un enorme daño a su economía, y para acabarla de moler se encontraron con las nuevas disposición del gobierno federal, que solo abra apoyo para los pequeños productores en el país, y aquí el problema es que en Durango, o en el norte de México los que tienen cinco o 10 hectáreas no las trabajan, las rentan o pasan al partido, simple y sencillamente porque no es costeable, porque los dueños ya son gente muy grande de edad, porque tienen años viviendo en los Estados Unidos, porque a los jóvenes hijo o nietos de ellos no les interesa el campo, vamos un gran porcentaje de verdadero productor este año ya no tiene pensado trabajar las tierras, sin apoyo no tiene caso, ni siquiera van a poder venderlo a precio oficial porque sobre pasan la cantidad de tierra que marca el programa federal, aun no inicia el ciclo, pero del Grillo se acuerda cuando vemos este fenómeno, este problema, menos gente trabajando la tierra y por ende más desempleo, si me equivoco me corrige por favor amigo lector, Hasta la próxima.